Las ONG de Salud Pública han dimitido del Foro Europeo de Alcohol y Salud, después de que el comisario europeo de Salud y Seguridad Alimentaria, Vytenis Andriukaitis, anunciara que no tiene planes de establecer una nueva estrategia europea sobre el alcohol. Esta decisión va en contra de las demandas de los Estados miembros y del Parlamento Europeo de poner en marcha una nueva estrategia global para hacer frente a los daños relacionados con el alcohol en Europa.
La composición del Foro, presidido por la Dirección General de Salud, incluye a representantes de la industria de bebidas alcohólicas y a diversas ONG del ámbito de la salud pública. Más de 20 organismos del ámbito de la salud, incluyendo EUROCARE (Alianza Europea de Políticas sobre el Alcohol), de la cual forma parte la Fundación Salud y Comunidad (FSC), EPHA (Alianza Europea de Salud Pública) y el CPME (Comité Permanente de Médicos Europeos) han presentado la dimisión colectiva en una carta abierta al comisario europeo de Salud y Seguridad Alimentaria, Vytenis Andriukaitis.
Los firmantes de la carta describen un listado de serios problemas derivados de la negligencia hacia la salud pública y de la priorización de los intereses de la industria del alcohol. Se trata de:
- La Comisión ha ignorado las peticiones del Parlamento Europeo y de los Estados miembros de desarrollar una nueva estrategia europea sobre el alcohol.
- Los planes de la Comisión para incluir el alcohol en un marco más amplio para abordar la enfermedad crónica no contemplan como objetivo muchos de los perjuicios causados por el alcohol que no tengan que ver con la persona consumidora, tales como conducir bajo los efectos del alcohol, la violencia doméstica y la explotación sexual infantil.
- No hay evidencia que demuestre que el Foro Europeo de Alcohol y Salud haya tenido ningún impacto en la salud pública.
- El Foro fue creado para apoyar la implementación de la estrategia sobre el alcohol que terminó en 2012. Sin la planificación de una nueva estrategia, no tiene sentido.
Los firmantes han expresado también su decepción por el rechazo del comisario de las peticiones de los expertos en salud pública. Éstos demandaban una estructura formal de reunión con los funcionarios de la Comisión para discutir sobre las políticas de alcohol, sin la presencia de grupos con intereses creados.
Mariann Skar, secretaria general de EUROCARE, ha manifestado que “el propio Comisario afirmó que las conductas relacionadas con el consumo de alcohol en Europa son beneficiosas para la industria del alcohol, pero no para la salud”. EUROCARE representa a 58 organizaciones en 25 países. Mariann Skar lamentaba profundamente la decisión de la Comisión de “no desarrollar una nueva estrategia sobre el alcohol. Esto va en contra de las demandas persistentes de los Estados miembros, el Parlamento Europeo y las ONG. La UE es la región de mayor consumo en el mundo, con 120.000 muertes prematuras relacionadas con el consumo de alcohol cada año. Por ello, es absolutamente necesario tener una estrategia global para hacer frente a los daños que se derivan del mismo».
Por su parte, el profesor Sir Ian Gilmore, presidente del Grupo Científico del Foro Europeo sobre Alcohol y Salud afirmaba: “Hoy es un día triste para aquellas personas que se preocupan por la salud en Europa. Ha quedado claro que la Comisión prioriza los intereses de la industria del alcohol a la salud pública. Muchas ONG han participado activamente y de buena fe en el Foro Europeo sobre Alcohol y Salud con la esperanza de progresar y reducir los daños relacionados con el alcohol. También señalaba que “sin evidencia que indique que el Foro ha conseguido algún resultado significativo, y sin la promesa de una nueva Estrategia sobre el Alcohol, no tenemos otra alternativa que alejarnos de esta organización que ha fracasado en el logro de esos resultados”.
Por último, Nina Renshaw, secretaria general de la Alianza Europea de Salud Pública, apuntaba: «La industria del alcohol debe haberse frotado las manos después de ser admitida por la DG SALUD a la última reunión del Foro, y ver que ni siquiera se propone mejorar la salud. La Comisión ha admitido finalmente que la comunidad sanitaria sospecha desde hace tiempo que se han abandonado completamente las políticas de alcohol. También afirmaba que “el Foro ha demostrado ser peor que inútil, una tapadera de promoción gratuita para la industria. La Comisión incluso respalda a la industria introduciendo la cultura del consumo responsable a los niños en centros de enseñanza primaria. Era necesario que la comunidad sanitaria pusiera fin a esta farsa».