Este programa se enmarca en una época en la que la comunicación escrita en papel entre las personas es signo de otros tiempos, algo desconocido entre los niños y que merece que conozcan y exploren, un intercambio en el que la letra nos hablaba de sentimientos y sensaciones transmitidas a través del papel, donde el tiempo dilataba las respuestas y las personas esperaban pacientemente…
La vieja correspondencia epistolar se va diluyendo en estos tiempos entre los numerosos medios tecnológicos de los que disponemos y el arte de escribir cartas va quedando poco a poco reducido a una minoría. Hemos perdido la cuenta del tiempo que ha pasado desde que abríamos con emoción contenida aquellas cartas en nuestros buzones de casa, de aquellas postales que enviábamos también, asociadas a los viajes y a las vacaciones de verano.
Por ello, en la Residencia y Centro de Día “Els Arcs” de Figueras (Gerona), gestionada por la Fundación Salud y Comunidad (FSC) y perteneciente al Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias de la Generalitat de Cataluña, hemos empezado una aventura a cuatro bandas, en la que un niño y una persona mayor que no se conocen van a escribirse con otro niño y otra persona mayor que se encuentran en otra ciudad.
Nuestro objetivo es amplio, pues queremos crear una relación entre varias personas que no se han visto nunca y cuyas circunstancias vitales pueden ser similares. Y queremos que la mano que escriba esta carta y quien se la lea al mayor, sea un niño o una niña.
Las relaciones con las personas mayores aportan beneficios para los niños que fortalecen su autoestima y sentimiento de valía, percibiendo de modo más positivo tanto a las personas mayores como el proceso de envejecimiento en sí, mejorando su rendimiento escolar, y disminuyendo su implicación en actos violentos.
Los mayores aprovechan estos encuentros intergeneracionales que ayudan a reducir los síntomas depresivos, resolviendo con mayor eficacia los problemas, aumentando la vitalidad, ampliando las oportunidades de seguir aprendiendo, desarrollando nuevas amistades, incrementando su autoestima y motivación, y haciéndose más fuertes para afrontar las adversidades.
La ONU reconoce en las conclusiones de la II Asamblea Mundial sobre el Envejecimiento, celebrada en el 2002 en Madrid, la necesidad de fortalecer la solidaridad entre las generaciones y las asociaciones intergeneracionales. Esta solidaridad intergeneracional es menor en las personas que viven en las residencias ya que, según la Encuesta sobre Condiciones de Vida de los mayores realizada en 2004, tan solo el 31,4% de los mayores había tenido relación con niños todos los días o casi todos los días, disminuyendo este intercambio intergeneracional hasta el 3,8% en mayores que viven en residencias.
La comunicación escrita entre las personas data de muy antiguo. El uso del correo ha abarcado a todos los aspectos de la vida de las personas, se ha utilizado para comunicarse en periodos de paz y en la guerra. Para transmitir noticias buenas y penosas. Y para hacer amigos, aproximarse al otro y descubrir realmente quién es, y también para hablar de sentimientos. La correspondencia juega con las ventajas que aportan la distancia y la reflexión…
Todo ello se convierte ahora en una gran aventura que desde la Residencia y Centro de Día “Els Arcs” se va a promover y a acompañar.