Juanma Romero es voluntario del programa “Acompañamiento para el Ejercicio de los Derechos Energéticos (AEDEs)”, desde el pasado verano, con la particularidad en su caso de que ha sido personal laboral del programa en Alicante y después, decidió seguir vinculado como voluntario en este mismo proyecto. Es graduado en Trabajo Social y cuenta con formación complementaria en inmigración e intervención social, orientación laboral y en violencia de género. Ha desempeñado su labor como trabajador social en el Ayuntamiento de San Juan de Alicante, también en Cruz Roja y actualmente, trabaja en los Servicios Sociales de Muro de Alcoy como trabajador social.
– Con motivo de la celebración del Día Internacional del Voluntariado el 5 de diciembre, estamos rindiendo un homenaje especial a todos los voluntarios/as de la Fundación Salud y Comunidad por la labor que vienen realizando durante todo el año, entrevistando a algunos de ellos/as. ¿Qué te parece esta iniciativa y qué significa este día para ti?
Me parece muy bien dar mayor visibilidad en este día a la labor que realizan los voluntarios/as desde las distintas instituciones. En el caso de la Fundación Salud y Comunidad, a través de esta iniciativa, es una forma de dar al voluntariado el reconocimiento que se merece.
– ¿En qué consiste tu tarea como voluntario y porqué decidiste hacerte voluntario?
Mi tarea consiste en acompañar en el ejercicio de los derechos energéticos a los usuarios/as del programa AEDEs, y también apoyar a los/as profesionales que conforman el programa.
Este acompañamiento lo realizamos desde tres niveles de intervención. En el primer nivel, acompañamos mediante una atención individualizada para la gestión y análisis de las facturas de luz, agua y gas.
El segundo nivel de acompañamiento consiste en la realización de talleres de formación para la adquisición de conocimientos en hábitos de eficiencia y ahorro energético.
Y, por último, en el tercer nivel, realizamos un asesoramiento individual en el hogar de los/as participantes para evaluar la eficiencia energética del mismo. Quiero destacar que este asesoramiento lo complementamos con la entrega de un kit de material que mejore el ahorro y la eficiencia energética del hogar (bombillas led, burletes para las puertas, sellados para la ventana, regletas de luz, economizadores de agua…).
– En tu caso, has sido personal laboral del programa y quisiste seguir vinculado como voluntario para seguir aportando con tu labor en la lucha contra la pobreza energética…
Así es, decidí seguir vinculado como voluntario al programa AEDEs, ya que quería seguir poniendo mi granito de arena en la lucha contra la pobreza energética. En la actualidad, una de las formas de exclusión social que más ha aumentado ha sido la pobreza energética. Creo que es necesario y fundamental la existencia de programas como este que tengan como objetivo principal mejorar la calidad de vida de las personas, reduciendo situaciones de vulnerabilidad o pobreza energética mediante el empoderamiento en los derechos energéticos.
Además, decidí seguir vinculado a la Fundación Salud y Comunidad como voluntario por el buen clima de trabajo que se había creado con los compañeros/as y también, por el vínculo de apoyo que se creó con muchos/as participantes del programa.
– Recientemente, has llevado a cabo dos talleres de formación dirigidos a la adquisición de conocimientos en hábitos de eficiencia y ahorro energético. ¿Qué destacarías sobre ello?
Fundamentalmente, la buena acogida que han tenido los talleres por parte de los/as participantes, ya que en la mayoría de los casos había un gran desconocimiento sobre los hábitos de eficiencia y ahorro energético. También es importante destacar el clima de apoyo que se creó entre las personas participantes, intercambiando consejos y experiencias propias.
En estos talleres, han aprendido conceptos básicos sobre el consumo eléctrico, hábitos de consumo en el hogar y fuera del mismo, así como los materiales idóneos para mejorar la eficiencia y el ahorro energético.
Estas acciones empoderan a las personas, facilitando la adquisición de conocimientos y herramientas que les permiten mantener un uso adecuado de los recursos, a la vez que poder optimizar el consumo de sus hogares.
– ¿Qué les dirías a las personas que se estén planteando hacer voluntariado en nuestra entidad?
Les diría que no lo duden y que prueben. El voluntariado en FSC es una experiencia muy gratificante, tanto a nivel personal como laboral, y una oportunidad de aprendizaje y de conocer nuevas realidades.
– Para finalizar la entrevista, ¿te gustaría comentar alguna cosa más?
Sí. Me gustaría aprovechar esta entrevista para dar las gracias, tanto a la fundación como a todos los/as profesionales que trabajan en el proyecto SEAFAS y en el programa AEDEs, por permitirme aprender de ellos/as y formar parte de esta “gran familia” que es la Fundación Salud y Comunidad.
Este espacio es posible gracias al Programa de Voluntariado de FSC subvencionado por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, con cargo a la asignación tributaria de 0,7% del IRPF y el Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias de la Generalitat de Catalunya, a través de la convocatoria de subvenciones de proyectos y actividades de entidades sociales en Cataluña.