El pasado 9 de marzo tuvo lugar la jornada “IV Àgora”, organizada por la Federación Catalana de Drogodependencias (FCD) con carácter anual. Durante el encuentro, celebrado en esta ocasión de forma telemática, se dieron a conocer buenas prácticas y experiencias de las organizaciones que integran esta federación, entre las que se encuentra la Fundación Salud y Comunidad (FSC). Por parte de nuestra entidad, participó nuestra compañera Isabel Benito, presentando la experiencia del blog “El patio de Ariadna y sus amigas”.

En la presente edición de esta jornada de intercambio de experiencias y buenas prácticas para el aprendizaje mutuo entre entidades, dimos a conocer el blog «El patio de Ariadna y sus amigas», una experiencia que surgió en pleno confinamiento, por iniciativa del equipo profesional del «Espacio Ariadna», servicio propio de FSC, y de los «Pisos de Violencia y Adicciones», dependientes del Consorcio de Servicios Sociales de Barcelona.

Si bien, tal y como explicó Isabel Benito, la idea inicial fue estar presentes y compartir estos primeros momentos de la pandemia con las residentes de ambos servicios, la iniciativa se ha ido reconvirtiendo en una ventana que pretende mostrar la esencia de lo que son, tanto las residentes como las personas que trabajan en estos servicios, desde su propia mirada. En este sentido, el blog ha ido transitando, adaptándose a cada nuevo momento que se ha ido presentando.

“En esta transformación, el blog ha tenido una función de entretener y lograr la cohesión de equipos, pasando por la difusión de nuestro trabajo y de lo que somos, ampliando la mirada. Hemos hecho visible lo invisible”, señalaba durante la presentación.

El blog está estructurado en diferentes menús, con acceso a contenidos variados:

  • Con voz propia.
  • Hablan de nosotras.
  • Artículos y recursos y
  • Ariadnas en cuarentena (que incluye los submenús arte, cine, cocina, cosas de casa, deporte, frases del día, lectura, manualidades y música).

La presentación de este blog durante la jornada «IV Àgora», creó mucha expectación e interés entre las personas asistentes, al tratarse de una iniciativa novedosa, en la que la ilusión del equipo profesional y de las usuarias ha estado siempre presente, en ese transitar conjunto, uniendo fuerzas.

«La unión con las orugas resultó un gran aprendizaje, y juntas pudieron redoblar esfuerzos. Eran diferentes, pero sus similitudes se sobreponían. Todas amaban la libertad, querían un mundo más digno e igualitario y se habían dado cuenta, al fin, que merecían todo lo bueno que la vida podía depararles», concluía en su presentación nuestra compañera Isabel Benito.