El delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Asís Babín, anunció ayer que la política de drogas “no sufrirá cambios estratégicos importantes” y se centrará en la prevención del consumo.

PNSDBabín fue nombrado recientemente delegado para el Plan Nacional sobre Drogas y, en su primera comparecencia pública, ha dicho que afronta su responsabilidad «con una visión de salud pública».

«La vigente estrategia nacional sobre drogas es fruto de un alto grado de consenso entre todos los sectores, ha sido consensuada y aprobada por unanimidad y sirve de guía para el avance de las acciones y programas», ha indicado.

Por tanto, ha añadido, «nuestra intención es mantener en todo momento los objetivos y ámbitos de las acciones contempladas en la actual Estrategia Nacional 2009-2016 y comenzar la elaboración del Plan de Acción 2013-016 teniendo en cuenta las evaluaciones que están en marcha y proceder al término del ejercicio 2012 a la evaluación prevista», para lo cual espera el acuerdo de las CCAA.

Babín ha anunciado la creación de un foro permanente de carácter técnico para la prevención, tratamiento y rehabilitación de las adicciones con los de departamentos concernidos de la Administración y con comisiones asesoras que incluirán una representación de las sociedades científicas, así como personas de importante trayectoria en las ciencias relacionadas con la problemática de las adicciones.

Los acuerdos del Foro se elevarían al Grupo Interministerial para las Drogas para su aprobación, ha dicho Babí, que ha añadido que su apuesta «es por la prevención».

Babín ha indicado también que «las sustancias con potencial adictivo y estatus legal en nuestro país (alcohol y tabaco) son las más consumidas tanto por la población general como por los estudiantes, seguidas de los hipnosedantes y, dentro de las drogas ilegales, por el cannabis».

Los hombres consumen en mayor número que las mujeres todas las sustancias, excepto en el caso de los hipnosedantes.

Babín ha indicado que «nos enfrentamos a grandes retos: cambios en los perfiles de los consumidores, un patrón de policonsumo cada vez más generalizado, precocidad en el inicio del uso de algunas sustancias, atención a la patología dual, envejecimiento de los consumidores problemáticos, cambios sociales, culturales y económicos».

Fuente: EFE