El servicio, de titularidad de la Generalitat de Cataluña, gestionado y dirigido por la Fundación Salud y Comunidad (FSC) y el Grupo Lagunduz, ha sido el primero en recibir las primeras dosis de la vacuna contra el coronavirus. Concretamente, el pasado 30 de diciembre, fueron vacunados un total de 78 usuarios/as y 44 profesionales de este centro. La primera persona en recibir la vacuna en los servicios de atención a personas mayores gestionados por nuestra entidad ha sido Amparo G. M., de 85 años, usuaria de este servicio de Reus, en Tarragona, desde noviembre de 2016. Se trata de una persona que padece problemas respiratorios.
El proceso de vacunación se inició por la tarde en las instalaciones del centro, teniendo una duración total de aproximadamente dos horas. Durante este tiempo, recibieron la primera dosis de la vacuna los usuarios/as y profesionales de la Residencia y Centro de Día “Roger de Llúria” de Reus. Concretamente, acudieron al centro tres equipos de profesionales para la vacunación, habiendo recibido una formación específica para ello, por las necesidades especiales de preparación que presenta esta vacuna.
Cada equipo encargado de suministrar la vacuna estaba formado por un médico y dos enfermeras, ocupándose dos equipos de vacunar a los usuarios/as y otro, a los y las profesionales de servicio.
Para ello, previamente la Generalitat de Cataluña solicitó al personal de las residencias que dieran su consentimiento informado a vacunarse. Estos primeros momentos, previos al proceso de vacunación, nos los explica con detalle Anna Garrido, coordinadora del Área Psicosocial del servicio: “primero, se puso en contacto con la dirección del centro la delegada para la coordinación de los centros de carácter residencial de la Generalitat, para informarnos de que se iba a iniciar el proceso de vacunación. Asimismo, nos comunicó que debíamos recoger los consentimientos informados y que nos avisarían con 48 horas de antelación, en relación al día y la hora que vendrían los equipos de vacunación al servicio”.
Seguidamente, días después, el equipo de vacunación COVID residencias se puso en contacto con la dirección del servicio para confirmar si el día 30 podía acudir, y se pactó que sería por la tarde. “Nos explicaron el funcionamiento, que nos vacunarían a todos/as y que teníamos que tener los consentimientos informados, tanto autorizando como no autorizando, de todos los y las profesionales y usuarios/as del servicio, y el mismo día 30 a primera hora, poder confirmar cuántas personas se vacunarían para traer las dosis necesarias”, señala Anna Garrido.
En relación a cómo transcurrió el proceso, destacar que un equipo de vacunación permaneció en el gimnasio del servicio supervisado, en todo momento, por la directora del centro, Yolanda Rubio, y que en las plantas 0, 1 y 2 se quedó supervisando y ayudando, la coordinadora del Área Psicosocial del servicio, Anna Garrido.
Cuando llegaron los equipos de vacunación, lo primero que hicieron fue colocarse los EPIS reglamentarios para comenzar el proceso, preparando vacunas siempre de 5 en 5, revisando la movilidad en las mismas, haciendo movimientos rítmicos 10 veces y observando que no hubiera grumos en las vacunas y que estuvieran bien líquidas, preguntando siempre a los trabajadores/as si habían tomado algún tipo de medicación antes de acudir a vacunarse, señala la directora del servicio, Yolanda Rubio.
“Los trabajadores/as, emocionados/as y, a la vez nerviosos/as, iban pasando uno a uno para recibir la primera dosis de la vacuna. Por indicaciones del médico, tenían que esperar 10 minutos por si a alguno/a le provocaba algún tipo de reacción. Por suerte, fue una vacunación exitosa, tanto en trabajadores/as como en residentes, ya que no se produjo ninguna incidencia médica. El equipo médico se mostró en todo momento muy profesional haciendo su trabajo”, añade Yolanda Rubio.
Por otra parte, según hemos podido saber, los trabajadores/as, al día siguiente, tuvieron dolor en el brazo en la zona del pinchazo, alguno/a estuvo más cansado/a de lo habitual, presentando escalofríos y cefaleas, si bien únicamente se produjo durante el día siguiente de la vacunación. En relación a las personas mayores vacunadas, tampoco hubo ninguna incidencia, algunas tuvieron dolor en brazo al día siguiente y otras no notaron nada.
La vacuna se administra en dos dosis: una primera (que fue la que recibieron) y, pasados 21 días, la segunda. La inmunidad se adquiere siete días después de la segunda dosis. Transcurridos los 21 días, los usuarios/as y profesionales que recibieron la primera dosis dispondrán de la segunda, para que el desarrollo de vacunación sea completamente efectivo. Por ello, se ha dispuesto el día 20 de enero la fecha para la vacunación de la segunda dosis en este centro.
Cabe destacar que por el momento se ha vacunado al 55% de los profesionales del servicio y que, en unos días, se procederá a vacunar al resto, dado que se ha vacunado a la mitad, por si se daban efectos secundarios de la vacuna y se producían bajas.
Finalmente, señalar que el pasado día 5 de enero, se inició el proceso de vacunación en la Residencia y Centro de Día “Els Arcs” de Figueras, en Gerona, al que le seguirán otros centros dirigidos y gestionados por la Fundación Salud y Comunidad, entre ellos la Residencia y Centro de Día “Las Fuentes” en Zaragoza y la Residencia y Centro de Día de Yécora, en Álava.
Esperemos que éste sea el primer gran paso y definitivo para la inmunidad de las personas residentes y de los/as trabajadores hacia la inmunidad al virus de la Covid pues son, sin duda, de los colectivos que más han sufrido, y siguen sufriendo, las consecuencias de esta pandemia a nivel de salud. Y aunque estos servicios han sido los primeros en los próximos días las vacunas llegarán al resto de servicios para personas dependientes.