• Recuerda que ‘allí no hay suficientes cuidadores y personal de enfermería’.
  • Ha propuesta el desarrollo de paquetes turístico para la tercera edad germana.
  • Insiste en los atractivos de una región ‘con unos costes laborales más bajos’.
  • Apuesta por la creación de proyectos innovadores frente a opciones ‘low cost’.
  • El titular de Hacienda es optimista: ‘El vaso cada vez está más lleno.

La Conselleria de Economía, Industria, Turismo y Empleo de la Generalitat Valenciana trabaja en un proyecto piloto con un operador germano para impulsar la creación en la Comunidad valenciana de «residencias para ancianos alemanes con necesidad de cuidados» que, incluso, podrían ser «instalaciones ‘ad hoc’, de forma que mantuviesen allí su comida y su forma de vida».

Así lo ha avanzado en una entrevista a Europa Press el titular de este departamento, Máximo Buch, quien planteó esta posibilidad a la Cámara de Comercio y a un operador del sector durante el viaje que realizó en octubre a Alemania, junto al presidente de la Generalitat valenciana, Alberto Fabra, para captar inversión extranjera.

Según explica, ese operador «se interesó» por el proyecto y solicitó más detalles y, de hecho, ya le han remitido «información concreta de edificios que podrían estar disponibles».

Buch subraya que «es una gran oportunidad» y argumenta, en este sentido, que «en Alemania no hay suficientes cuidadores y personal de enfermería», y en España sí, por lo que «es más eficiente en coste que vengan aquí las personas mayores y, además, disfruten de un entorno cálido en invierno y puedan salir a pasear sin problemas».

Junto a esta iniciativa, en su viaje también contactaron con el principal operador turístico, TUI, que se mostró «muy interesado en desarrollar turismo de tercera edad, que es un turismo de invierno, más cultural y de naturaleza», apunta.

En cuanto a la posibilidad de atraer a grandes empresas, destaca que España «ofrece la gran ventaja de la cercanía» en un momento en que «muchas compañías importantes que trasladaron su producción a China u otros países se están dando cuenta de que aparentemente tiene un coste más bajo, pero luego acaba siendo alto por los lotes de fabricación, el tiempo de entrega y los costes de transporte».

En ese escenario, la Comunidad Valenciana pretende hacer valer su «combinación de oferta logística, con el acceso rápido a sus mercados que brindará a estas compañías el Corredor Mediterráneo, de gente muy preparada y de unos costes laborales significativamente más bajos que en Alemania y otros países del norte de Europa».

«Es mucho mejor traer la producción a España que llevarse a los españoles a producir a Alemania«, sostiene Buch, quien asegura que los contactos con empresas del sector auxiliar del automóvil y también para ese tema de residencias de tercera edad «van por buen camino». «Estas cosas llevan su proceso, pero avanzamos», sentencia.

«HAY QUE IR A LA GENTE QUE TIENE DINERO»


En la actualidad, su departamento centra sus esfuerzos de captación de inversión «en países emergentes que empiezan a tener recursos, como Kazajstán, que tiene muchísima liquidez como productor de gas y petróleo». «Al final hay que ir a la gente que tiene dinero, conocerles y atraerles», incide el conseller, quien viajó a ese país a principios de diciembre y ya avanzó que recibirán en el primer trimestre una misión comercial de empresarios y autoridades kazajas.

En esa misma línea de «atraer a los que ahora tienen liquidez», también alude al anuncio de Fabra de ofrecer «suelo a coste prácticamente nulo» para «inversiones estratégicas atractivas».

Buch ratifica su apuesta por la industria y valora que «está resurgiendo después de 15 años en los que no creció, a diferencia de otros sectores», hasta representar un 15 por ciento del PIB, peso que pretenden aumentar hasta el 20 por ciento dada su capacidad de «crear trabajo estable y generar seis puestos por cada empleo industrial».

En ese sentido, la Conselleria de Economía trabaja con patronal y sindicatos en la redefinición de la Estrategia de Política Industrial (EPI) y espera «tener un borrador en enero» y contar con la «versión definitiva» de ese documento antes de marzo.

Sobre este tema, Buch apunta que al haber asumido las competencias de turismo en la reciente remodelación del Consell, esa hoja de ruta para 2020 «será más ambiciosa» y «conjuntará todas las estrategias del turismo, la energía y la industria en un paquete coherente que sea un plan tractor que impulse la reactivación económica».

INNOVACIÓN Y «CEREBRO DE OBRA» FRENTE A OPCIONES ‘LOW COST’

 

A nivel de empresas, sostiene que la clave del éxito reside en el modelo de compañía, no en determinados sectores, y que triunfarán aquellas que innoven y «funcionen a base de mano de obra cualificada, de ‘cerebro de obra’ que genere valor, ya que mano de obra ‘low cost’ hay en otros países». «Se trata de hacer un producto innovador, de reinventarse, y eso se está viendo ya en cifras de empleo en los sectores de tecnología media-alta», agrega.

Buch espera dejar atrás «en los próximos meses» los retrasos en los pagos, que «este año han llegado a superar el año» y resalta que «poco a poco, se va construyendo la confianza de los inversores».

«EL VASO CADA VEZ ESTÁ MÁS LLENO»


«El vaso cada vez está más lleno», celebra el conseller, quien insiste en que su optimismo «está basado en datos objetivos y en otros anecdóticos pero significativos» y asevera que «desde fuera, la visión es bastante positiva, y los inversores, incluso desde el punto de vista inmobiliario, ya ven la Comunidad Valenciana y a España como un país de oportunidades».

El próximo 23 de enero cumplirá un año al frente de Economía, un período que recuerda como «duro» y muy marcado por el apoyo estatal para hacer frente a los vencimientos y por la escasez de liquidez sufrida en verano, que motivó múltiples «protestas de colectivos que no cobraban» y les impidió «hacer políticas de construcción».

No obstante, Buch mantiene que esa situación «se ha remontado» gracias al Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) y que «esa época de escasez económica va tendiendo a acabarse». Así, reitera que «en el segundo semestre llegará el principio del punto de inflexión» y afronta este nuevo ejercicio «con ilusión» y convencido de que «hay que colaborar con todo el mundo, con el Gobierno y con comunidades vecinas», como ya hicieron en la defensa del Corredor Mediterráneo.

Fuente: El Mundo