Relatando una aventura con vistas

Escribo desde la recepción de la Residencia y Centro de Día para personas mayores de Yécora (Álava). Detrás de mi pantalla de ordenador, vislumbro ocho personas, algunas de las cuales mueven la cabeza al son de la música que se escucha de fondo, que lejos de lo que cualquiera podría pensar, es muy actual.

Una usuaria se atreve a mover las manos al compás, mientras la que se sienta al lado se ríe; otro se muestra impasible sumergido en la lectura de un periódico riojano, porque él es de un pequeño pueblo de La Rioja a 20 minutos de la residencia; otra usuaria lee “El Correo”, mientras dice “éste es el periódico de aquí”. Un par de residentes se han quedado dormidos en los sillones y cabecean asintiendo. Ese mismo cabeceo asintiendo nos lo hemos encontrado antes, pero no en usuarios/as que se echan una siesta, sino en trabajadoras bien despiertas que abrazan nuestra llegada. Asienten al cambio y nosotros confiamos en traerles las mejoras que ansían.

La palabra clave de este viaje ha sido “potencialidad” y, aunque quizás el potencial es un término vago tal y como nos señaló Úrsula, la usuaria con más recorrido en la residencia, nos gusta este concepto. A Úrsula la llaman cariñosamente “la guerrera” porque pone a todo el mundo en su sitio hablando claro, y también a nosotros que somos los recién llegados. “Necesitamos menos palabras y más hechos” nos dice, mientras nos enseña con mucha amabilidad lo impecable que tiene su habitación; tanto con ella como con el resto de usuarios/as hay una ilusión compartida.

He titulado este relato “con vistas” porque creo que resume, por un lado, la preciosidad de este lugar. Hay una sala enorme con ventanales a la sierra, a los viñedos y a la montaña a la que llaman “El león dormido”. Y, por otra parte, responde a la apuesta de la Fundación Salud y Comunidad (FSC) que, en consorcio con el Grupo Lagunduz, empieza a gestionar su primera residencia propia para personas mayores.

Hay una buena acogida a nuestra llegada por varios motivos, los principales son el rescate económico que hemos realizado, apostando por la subrogación del personal y la recuperación del edificio, pero sobre todo porque la ética, el bagaje psicosocial y asistencial y la ilusión se transmite. Asienten, unos más dormidos que otros, pero al unísono de la música, la que hemos empezado a traer, que no suena igual, pero que parece que nos gusta más a todos.

Al salir de la residencia, se ve en letras grandes en todo el lateral del edificio una V y una B, de “Virgen de Bercijana”, la virgen del pueblo, que tenemos en la capilla de la planta baja, al lado de una cocina propia que huele que alimenta “como en casa”. Viendo las letras desde el camino verde que va a la balsa por una ruta histórica, me viene a la cabeza Buenas Vistas, Vida, Viñedos, Vejez, Bienestar… Y un pueblo que se alza alejado del bullicio de la ciudad más cercana, Logroño, perdiéndose en una serenidad difícil de describir y contrapuesta a nuestro ritmo acelerado de vida, reuniones, portátiles y cafés.

Producimos ideas de mejoras, creatividad del cambio y gestión de las resistencias, mientras nuestros usuarios/as producen recuerdos, ejercitan sus piernas y mentes, y centran su mirada en la sierra. Desde posiciones diferentes, todos miramos hacia la misma sierra, y siempre hacia adelante, entendiendo la posición del otro y creando, en este caso, sinergias para que la residencia funcione lo mejor posible. Sabemos que el movimiento y el cambio generan resistencias y miedo a lo desconocido, pero a los residentes les pedimos un salto de fe (ellos dirían que con el beneplácito de la Virgen de Bercijana), aunque ya intuyan que están en buenas manos con un equipo de transformadores de realidades que hablan de personas.

No está nada mal para alguien que viene de la psicología y de los proyectos sociales ver que en un momento generalizado de cambio, algunas cosas siguen siendo las mismas, pero otras tendrán que cambiar y habrá que aprender a darlas a conocer para que sepan tan bien (o incluso más) de lo que huele la cocina de este centro, que, desde luego, no tiene nada que envidiar a las del resto.

Paula Alcaide
Área de Atención a la Dependencia


La exposición de fotografía colaborativa "Revelar", organizada por la Fundación Salud y Comunidad y "La Cotxera", llega a Valencia

La muestra ha quedado expuesta en la estación de tren de València Nord, tras su paso por la estación de Castelló, donde se ha podido ver del 14 al 27 de septiembre. Anteriormente, durante el mes de febrero, se pudo visitar en la Facultad de Ciencias Humanas y Sociales de la Universidad Jaume I de Castellón. En ella, 6 participantes del Programa de Atención Socio-sanitaria y Reducción de Daños realizado en el CIBE de Castellón, dispositivo para drogodependientes de la Fundación Salud y Comunidad (FSC), nos acercan y muestran su realidad cotidiana.

“Cuando iniciamos el proyecto la expectativa no era tan alta. Se trataba de dar la oportunidad a las personas que acuden al Centro de Intervención de Baja Exigencia de Castellón de aprender nociones básicas de fotografía artística y que pudieran expresarse por este medio. Pero al revelar las fotografías vimos que contaban historias dignas de ser compartidas más allá de este servicio”, explica Belén Sánchez Garcés, directora del Centro de Intervención de Baja Exigencia (CIBE) de Castellón.

“Revelar” se ha podido visitar en dos espacios de Castellón con afluencia de público muy diverso. En febrero, se expuso en la Universitat Jaume I, donde despertó un gran interés por parte de los estudiantes. En septiembre, Adif facilitó que se pudiera exponer en la estación de tren de Castelló, un espacio que ha permitido que la muestra llegara a un gran número de personas. Además, la presencia en medios de comunicación locales, ha llevado la exposición más allá de estos espacios, pudiendo trasmitir su mensaje a un mayor número de personas.

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La muestra cumple dos objetivos: en primer lugar, permite que 6 usuarios/as del CIBE de Castellón puedan compartir con el público su particular mirada del mundo. Por otra parte, pretende luchar contra los estereotipos que envuelven a las personas que padecen una adicción.

“Por el momento, hemos conseguido estos retos iniciales y una visibilidad de la exposición mayor de la que estimábamos en un primer momento. La muestra busca que podamos identificarnos con algunas de las historias contadas a través de las imágenes, que es algo que apela directamente a las emociones y vivencias propias”, afirma Belén Sánchez Garcés. Ahora, “Revelar” llega a la estación de tren de València Nord donde se podrá visitar hasta el 12 de octubre.

También, los participantes que han colaborado con su obra en esta muestra se sienten satisfechos por los resultados obtenidos hasta el momento. L.O.V. explica que le gusta que otras personas puedan ver sus fotografías y que las hizo pensando en poder reflejar su soledad y las emociones o sentimientos derivados de este estado. “Uno busca hacer fotos que cuenten algo, pero que a la vez sean bonitas, porque al final lo que quieres es que a los demás les gusten, que les guste algo que tú has hecho, y creo que lo hemos conseguido”, señala L.O.V., usuario del CIBE de Castellón que ha participado con su obra en esta muestra.

Por su parte,  J.O.V. afirma que no pensaba que “Revelar” se iba a mostrar en tantos espacios, pero que le parece muy bien que haya sido así “para que se sepa que existen centros como el CIBE de Castellón que ayudan a las personas con problemas y que son muy necesarios”, afirma.

Desde el Centro de Intervención de Baja Exigencia de Castellón, recurso socio-sanitario financiado por la Conselleria de Sanitat de la Generalitat Valenciana, que cuenta con otras ayudas procedentes del Ayuntamiento y de la Diputación de Castellón, esperan que la muestra reciba también muchos visitantes en este nuevo emplazamiento. El servicio recibe además el apoyo del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, a través de la subvención del IRPF para fines sociales.


Balance positivo del Servicio de Intervención Especializada (SIE) Mataró-Maresme en el primer año de gestión de FSC

El próximo 1 de diciembre, este servicio del Departament de Benestar Social i Família de la Generalitat de Catalunya, gestionado por la Fundación Salud y Comunidad (FSC), cumplirá un año.  El recurso atiende a mujeres que viven o han vivido una situación de violencia machista y a sus hijos e hijas.

El SIE Mataró-Maresme (Barcelona) nace, tras una larga demanda de la comarca del Maresme de más de 7 años. Sus inicios tuvieron lugar en una ubicación provisional, donde la falta de espacio para las entrevistas a mujeres, y sus hijas e hijos, fue un factor condicionante de la atención directa.

De los 30 municipios con que cuenta la comarca, ha recibido a mujeres de prácticamente la totalidad de ellos, lo que ha disipado el temor inicial expresado por más de un municipio pequeño de quedar excluido en detrimento de los más grandes. La sensibilización de la comarca hacia la violencia machista desde todos los ámbitos, unida a la labor de difusión que desde el propio SIE se ha realizado de la tarea que desempeña, ha hecho posible que de esas mujeres atendidas, alrededor de un 85% se haya derivado desde otros servicios.

El 11 de junio, el SIE Mataró-Maresme se trasladó a su ubicación definitiva, en la C/ Churruca, de Mataró, donde comparte local con el Centro de Información y Recursos para las Mujeres (CIRD) de esa localidad. Se trata de un espacio acogedor y tranquilizador para las mujeres que acuden al servicio.

Por su parte, las y los menores cuentan con una sala infantil donde poder expresar sus vivencias a través del juego. Los conocimientos de las profesionales que conforman el equipo, la sensibilidad y empatía que expresan, junto con un espacio adecuado, permite crear con las mujeres atendidas, así como con sus hijos e hijas, el necesario vínculo de confianza para poder trabajar su salida de la violencia y su recuperación.

Por tanto, podemos decir que el balance de este primer año del SIE Mataró-Maresme es positivo. Con motivo del 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, el SIE organizará una jornada conjunta junto con el Servicio de Información y Atención a las Mujeres (SIAD) comarcal y el CIRD de Mataró, destinada a profesionales de toda la comarca. Creemos que la celebración de este encuentro supondrá la consolidación de la presencia del SIE en el Maresme, uno de los objetivos marcados para este primer año. Otro de nuestros retos, la consolidación de la atención directa, también se ha cumplido.

A partir de aquí, se plantean nuevos objetivos para el segundo año: la atención grupal, el impulso de un protocolo comarcal contra la violencia machista y el trabajo en red, son solo algunos de ellos. Retos que se plantean con ilusión, ya que permiten avanzar un poco más en el objetivo global de erradicar la violencia de género de nuestra sociedad.

Enhorabuena a todo el equipo del SIE Mataró-Maresme por el trabajo realizado durante este año.

Leonor Valencia
Directora y jurista del SIE Mataró-Maresme


Picasso Project se acerca a los jóvenes españoles en Múnich durante el verano

Míriam Ovejero, responsable de Información y Administración de Picasso Project España, se desplazó durante el pasado mes de agosto hasta la ciudad alemana de Múnich para supervisar el proceso de acogida y filtro de las solicitudes de este programa de orientación para la búsqueda y mejora de empleo, y ofrecer una atención personalizada. La profesional se encarga de la captación, información inicial y acogida de candidatos/as del proyecto en España.

 “La idea de desplazarnos a Múnich surgió de la necesidad de hacer un esfuerzo por acercarnos a los jóvenes españoles que se encuentran en esta ciudad y que, a diario, nos contactan para que les apoyemos en su búsqueda o mejora de empleo en Alemania”, expresa Míriam Ovejero. “Puesto que el contacto inicial con los candidatos/as se realiza vía telemática desde España, quisimos ir hasta allí para que nos conocieran y pudieran preguntarnos en persona lo que quisieran sobre el proyecto, antes de iniciar las sesiones de orientación laboral con la responsable de Picasso Project Baviera, Lucía Mosterín Höpping”, continúa explicando.

Las cuestiones más consultadas por los interesados/as en el programa fueron los requisitos de acceso al mismo, especialmente los relacionados con el trámite del Certificado de Inscripción Consular, y otras cuestiones referentes al desarrollo y metodología del proyecto.

También, se detectó por parte de algunos de los candidatos/as la creencia de que la obtención de un empleo de acuerdo a su formación se produciría muy rápidamente. Sin embargo, muchos de ellos desconocen el peso que tienen las herramientas de presentación (como el Currículum Vitae y la carta de presentación), así como las habilidades que se han de tener a la hora de superar una entrevista con éxito. Ello puede generar una cierta desmotivación que desde el proyecto paliamos con nuestro apoyo activo en estos aspectos.

Durante estos días se contactó con varias decenas de jóvenes como Patricia (ingeniera industrial, 31 años) y Juan (diseñador gráfico, 30 años), que agradecieron “la cercanía y las facilidades ofrecidas por los profesionales de Picasso Project al desplazarse hasta Múnich para realizar esta primera acogida”. Incluso alguno se animó a inscribirse en el programa como Ana (informática, 26 años), que ya ha empezado con la orientación.

Picasso Project España se plantea dar continuidad a esta iniciativa informativa, en colaboración con las responsables de las respectivas delegaciones alemanas, desplazándose puntualmente a distintas ciudades de las regiones alemanas en las que trabaja: Baviera (Múnich o Núremberg), Baden-Württemberg (Stuttgart, Friburgo, Karlsruhe o Heidelberg) y Hesse (Frankfurt), sin descartar otras ciudades alemanas como Berlín, a la que viajan miles de jóvenes españoles/as en búsqueda de empleo.

Picasso Project es una iniciativa de la Fundación Salud y Comunidad que, desde abril de 2014, cuenta con una subvención del Ministerio de Empleo y Seguridad Social para apoyar la orientación laboral de jóvenes españoles en las regiones alemanas de Baviera y Baden-Württemberg. Desde entonces, el proyecto ha orientado laboralmente a más de 150 personas, de las que aproximadamente un tercio de ellas se encuentra trabajando en ámbitos acordes a su perfil profesional, tales como la mecánica, la ingeniería, el periodismo o las finanzas, con el apoyo de Picasso Project.


FSC participa en el Día Internacional para la Prevención de la Sobredosis por drogas

El Centro de Atención y Seguimiento en Drogodependencias (CAS) del Centro Penitenciario Brians en Barcelona, gestionado por la Fundación Salud y Comunidad (FSC) y financiado por el CATSALUT del Departament de Salut de la Generalitat de Catalunya, se sumó el pasado 31 de agosto a esta celebración. El lema de este año fue "Las muertes por sobredosis se pueden prevenir".

 Como cada año, FSC se unió a la celebración del Día Internacional de la Prevención de la Sobredosis. Esta conmemoración pretende aumentar el nivel de conciencia para que los afectados/as sepan cómo prevenir una sobredosis y cómo actuar ante esta situación. A la vez, busca disminuir el estigma asociado al consumo de drogas. Es una oportunidad de sensibilización para que la sociedad entienda que una sobredosis es un problema de salud prevenible.

La sobredosis, junto con las enfermedades infectocontagiosas, como el Sida y las hepatitis, son las principales causas de mortalidad entre los consumidores de drogas inyectables. Además, sigue siendo una causa importante de mortalidad entre los jóvenes en Europa. Los datos del Eurostat 2013 muestran que representa más del 3,4% de todas las muertes entre los europeos de 15 a 39 años.

Desde hace unos años, se viene celebrando el Día para la Prevención de la Sobredosis, evento que el CAS de Brians de Barcelona acogió desde sus inicios como una fecha a la que sumarse, con el objetivo de visibilizar y abordar este fenómeno sanitario relacionado directamente con muchos de los usuarios/as que atiende.

Cada 31 de agosto, se ponen en marcha una serie de acciones que se han diseñado previamente en los centros penitenciarios de Brians 1 y 2. En esta ocasión, se llevaron a cabo dos tipos de intervenciones. Por un lado, se crearon carteles publicitarios que se exhibieron en zonas de elevado tránsito de personas privadas de libertad, con el lema “Las muertes por sobredosis se pueden evitar”. Esta acción se complementó con la distribución de trípticos facilitados por la Subdirección General de Drogodependencias de la Generalitat de Catalunya.

Por otro lado, el equipo del CAS del Centro Penitenciario Brians en Barcelona puso en marcha 8 talleres en diferentes módulos para valorar conjuntamente con los asistentes a dicha actividad las situaciones más peligrosas y de mayor riesgo a la hora de sufrir una sobredosis. Para ello, resultó fundamental la labor de diferentes Agentes de Salud que, días antes de los talleres, fueron anunciando y reclutando participantes para los mismos.

En esta formación se utilizó un vídeo elaborado por el Canal Salut de la Generalitat de Catalunya para prevenir y saber actuar en casos de sobredosis. Este vídeo, que propone mensajes dirigidos a usuarios/as de drogas inyectables, sirvió como herramienta introductoria para trasladar información relacionada con la prevención de sobredosis.

https://www.youtube.com/watch?v=XbNv2JoPhVA

La realización de estos talleres fue todo un éxito, ya que a los mismos asistió un gran número de participantes con muchas ganas de aprender, y también de compartir sus experiencias y conocimientos. En este sentido, se pudo combinar la dimensión instructiva y la referente al abordaje emocional, teniendo en cuenta que, desgraciadamente, muchas de estas personas han sufrido alguna sobredosis o han vivido la pérdida de compañeros/as por este motivo.

Finalmente, en la última parte de los talleres, se hizo hincapié en las actuaciones a llevar a cabo y se transmitió la idea de que, si bien hay que prevenir la sobredosis, podemos también actuar si se presenta.


El CAI de Alicante consolida su 8ª campaña para la detección precoz de problemas oculares

El pasado mes de julio, la Fundación Jorge Alió para la Prevención de la Ceguera realizó, por 8º año consecutivo, una campaña de detección, prevención y atención oftalmológica entre los participantes del Centro de Acogida e Inserción para Personas sin Hogar de Alicante, de titularidad municipal y gestionado por la Fundación Salud y Comunidad (FSC).

La Fundación Jorge Alió para la Prevención de la Ceguera se constituyó en Alicante en 1996. Su labor está dirigida al fomento de la investigación, la docencia, la medicina preventiva y el tratamiento de las enfermedades oculares, prestando especial atención a los colectivos más desfavorecidos.

Su nivel de proyección y la calidad de su trabajo propiciaron que, en el año 2008, desde el Área Sanitaria del CAI de Alicante, se valorara la conveniencia de trabajar conjuntamente, en el marco del programa de Cuidados de la Salud del centro. “El fruto de este trabajo en red han sido las 8 campañas de detección precoz de problemas oculares, en las que se ha atendido a 164 personas sin hogar, vinculadas a los programas de alojamiento y servicios externos de nuestro centro”, explica Pedro Rodríguez Picazo, enfermero y responsable del Área Sanitaria del CAI de Alicante.

Diferentes estudios realizados con personas sin hogar describen una mayor tasa de problemas de la vista en lesiones del ámbito de refracción, astigmatismo y glaucoma respecto a la población en general  (Ho et al. 1997, Gelberg et al. 2000). Los resultados obtenidos en las diversas campañas del CAI de Alicante apuntan en la misma dirección. En concreto, se ha encontrado un número elevado de problemas refractivos (un 48% de las personas atendidas, cuando la prevalencia en la población general de este tipo de problemas es de un 43%). Es significativo también el dato de que, de las 24 personas en las que se detectaron anomalías visuales tales como glaucoma, cataratas o alteración del fondo de ojo, solo 4 de ellas llevaban un seguimiento oftalmológico previo.

El cribado realizado sobre patología ocular en estas campañas ha permitido informar y derivar a la totalidad de los participantes del CAI a los servicios de especialidades para su tratamiento. El trabajo conjunto realizado por la Fundación Jorge Alió para la Prevención de la Ceguera y el CAI, permitió la participación en 2011 de algunos profesionales del centro en la décima Jornada de Optometría de la Universidad de Alicante, con la ponencia “Exclusión, drogas y trastorno mental: alteraciones oculares prevalentes”. Como resultado de ello, se consiguió sensibilizar y, en la práctica, un convenio con una óptica que provee desde entonces de gafas, de forma totalmente gratuita, a los participantes del servicio con problemas refractivos.

Desde el Área Sanitaria del centro entendemos que ayudar a ver un futuro mejor, en ocasiones, pasa también, simplemente, por ayudar a ver mejor... es ya un paso”, puntualiza Pedro Rodríguez Picazo responsable del Área Sanitaria del CAI de Alicante.

Más información: http://sinhogar.proyectoenred.org/con-vistas-al-futuro


Sentidos de lo común. Por una mirada radical sobre la exclusión residencial

La mirada radical apunta a la raíz de las cosas. Pero las raíces, por lo general, no son visibles. Intentar sacarlas a la luz puede resultar en ocasiones violento, y suponer un riesgo para aquello que queremos estudiar. Debemos tener siempre presente esta doble condición del conocimiento: se muestra a la vez como herramienta indispensable en la construcción de alternativas y como factor de desestabilización de la cohesión en torno a un determinado sentido común. El reto será, por tanto, no renunciar a señalar las raíces de los problemas sociales, al tiempo que construímos con paciencia, desde el diálogo y nuestra práctica diaria, nuevos sentidos de lo común.

En ocasiones, he debatido con distintos profesionales sobre la conveniencia de mantener una mirada radical sobre los fenómenos de la exclusión residencial. Por lo general, se pone en duda que señalando los procesos de exclusión social de amplio alcance, o haciendo hincapié en las condiciones de acceso al mercado de la vivienda, se pueda acompañar con éxito los procesos individuales de inserción de las personas sin hogar. Supuestamente éstas tienen grandes déficits de socialización, y el ser conocedoras de los procesos estructurales que condicionan el acceso a una vivienda, les serviría de "justificación" e impediría que se hiciesen responsables.

Esta visión forma parte de un fuerte sentido común, que se ha formado a partir de las teorías económicas individualistas, del histórico peso del asistencialismo confesional en la intervención social, y de la aceptación, como si de una fatalidad se tratase, de las políticas neoliberales aplicadas desde hace más de treinta años en todo el mundo. La separación conceptual entre una "responsabilidad social" y una "responsabilidad individual" se ha mostrado, como muchos autores han argumentado (R. Castel, 1997; A. Supiot, 2011; Abrahamson, 1995; A. Sen, 1995), inoperante para comprender la "cuestión social ampliada" en las sociedades postindustriales. Pero no por eso ha dejado de funcionar como discurso legitimador de un determinado orden de cosas.

Por otro lado, adoptar una mirada radical sobre la exclusión residencial simplemente consiste en apuntar que el problema de las personas sin hogar se explica fundamentalmente por tres variables:

  1. la mercantilización de la vivienda y la política social al respecto,
  2. la precarización del mercado de trabajo y el desempleo estructural
  3. la debilidad de los distintos Estados del Bienestar y su paulatina desmantelación.

Para quien esté al día de la abundante literatura científica sobre el sinhogarismo esta visión no será, sin duda, nada escandalosa. Pero, a menudo, la formación de las personas que trabajamos en el ámbito social y la creciente profesionalización de los recursos desde finales de los años 80, no ha recogido las mismas sensibilidades y estándares de calidad en los distintos países europeos. El atraso de España en este sentido viene constatándose al menos desde mitad de los años noventa (Laparra et. al., 1995), por lo que nuestro esfuerzo debe ser mayor.

En mi trabajo en el Centro de Acogida para Personas sin Hogar  de Alicante (de titularidad del Ayuntamiento de Alicante, y gestionado por la Fundación Salud y Comunidad desde 2002), he podido comprobar cómo mantener una visión radical sobre la exclusión residencial, a partir del estudio, la formación continua y la colaboración con el ámbito académico, no solo mejora el acompañamiento a los participantes, sino que produce una ruptura epistemológica muy sana para cualquier profesional. Ya que nos sitúa en la coyuntura de identificar los límites de nuestra intervención, y qué parte de nuestro trabajo puede reproducir las mismas pautas excluyentes de la sociedad general. Tampoco en esto hay nada excesivamente novedoso: el conocido "efecto Mateo" es un lugar común para quienes estudian los procesos de exclusión y el trabajo desde los distintos Servicios Sociales.

Por otro lado, el trabajo social radical desarrollado en Gran Bretaña, o las propuestas de Marchioni (La utopía posible: la intervención comunitaria en las nuevas condiciones sociales, 1994), son vertientes teórico-prácticas disponibles desde mediados de los noventa, que siempre podemos explorar como parte de nuestro trabajo de mejora de la atención.

Sin duda, el constatar los límites de nuestra intervención y las contradicciones sociales de los recursos para la inserción en los que trabajamos, nos sitúa muchas veces en posiciones incómodas. Pero esta incomodidad es, precisamente, la que lleva a la búsqueda del conocimiento, a la experiencia de la mirada radical que, al tiempo que cuestiona, nos cuestiona. Merece la pena correr el riesgo, porque la recompensa será cambiar un sentido común muchas veces paralizante e infértil, por nuevos sentidos de lo común, ricos en matices y sensibilidades, que se adapten a las  condiciones cambiantes y no se cansen de proponer "utopías posibles".

Juan M. Agulles.
Sociólogo. Educador en el Centro de Acogida e Inserción (Alicante).


La muestra de fotografía colaborativa "Revelar", organizada por FSC y "La Cotxera", se expondrá en las estaciones de ferrocarril Castellò y València-Nord

El vestíbulo principal de estas estaciones acogerá la muestra fotográfica colaborativa ‘Revelar’. Una exposición compuesta por la obra de 6 artistas que participan en un Programa de Atención Socio-sanitaria y Reducción de Daños realizado en el Centro de Intervención de Baja Exigencia (CIBE), dispositivo para drogodependientes de la Fundación Salud y Comunidad (FSC) en Castellón.

La exposición podrá verse entre los días 14 y 27 de septiembre en la estación de Castelló, y desde el 28 de septiembre y hasta el 12 de octubre en la de València Nord.

El proyecto, dirigido por Oscar Boronat (Asociación Audiovisual “La Cotxera”), es fruto de un taller de fotografía impartido durante el pasado año en el CIBE de Castellón. Se trata de una muestra de fotografía colaborativa, realizada por “La Cotxera”, asociación cultural nacida en Castellón, en colaboración con FSC, en la que 6 usuarios del CIBE de Castellón en situación de vulnerabilidad por problemas de adicción, nos acercan y muestran su realidad cotidiana a través de un objetivo.

Para esta exposición, cada autor debía realizar un reportaje fotográfico en el que mostrara su realidad, a través de una cámara de fotos. Se trata de una iniciativa de arte colaborativo que pretende dignificar y visibilizar la realidad de sus protagonistas, utilizando la fotografía como medio de expresión.

Cada imagen es una invitación al observador para que sienta, descubra e imagine… Este proyecto no pretende inspirar una mirada compasiva, su intención más bien es la de visibilizar la realidad de sus protagonistas, su dignidad y sus historias personales que suceden en un mismo mundo común y que amplían los límites de lo visible.

Los artistas participantes en esta exposición, han contado su historia, gracias a la fotografía como medio de expresión. Se trata de una revelación de su arte, de sus pasiones e inquietudes, pero sobre todo de sí mismos.

La colaboración de diferentes organismos hace posible este proyecto itinerante

Esta iniciativa forma parte de las acciones de responsabilidad social corporativa y sostenibilidad de Adif, a través del Programa Estación Abierta. Adif ha fijado siete compromisos para dar respuesta a los desafíos que plantean la sociedad y el medio ambiente en materia de responsabilidad social y sostenibilidad. Uno de estos objetivos es hacer de las infraestructuras e instalaciones ferroviarias un espacio cada vez de mayor valor para la ciudadanía, aportador de bienestar y progreso, así como solidario con los que más lo necesitan.

En este sentido, una de las líneas de actuación de Adif consiste en potenciar las estaciones como espacios de encuentro, cultura y difusión de valores accesibles a todos a los ciudadanos.

Con este fin nace el Programa Estación Abierta Adif, en el que se enmarca esta exposición, y en el que tienen cabida actividades de interés social y utilidad pública, como exposiciones, conciertos y campañas de difusión y sensibilización de valores.

Por su parte, FSC y la Asociación Audiovisual “La Cotxera” quieren agradecer también a la empresa “Cartonajes la Plana” de Betxí (Castellón) su colaboración en el proyecto, a través de la construcción y cesión de la instalación de cartón sostenible sobre la que se exhibe la muestra.

El Centro de Intervención de Baja Exigencia de Castellón es un recurso socio-sanitario financiado por la Conselleria de Sanitat de la Generalitat Valenciana, que cuenta con otras ayudas procedentes del Ayuntamiento y de la Diputación de Castellón. El servicio recibe también el apoyo del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, a través de la subvención del IRPF para fines sociales.


Claves en perspectiva de género en la intervención con mujeres que han vivido violencia machista

“No se nace mujer, se llega a serlo” (Simone de Beauvoir): La construcción de género.

La violencia contra las mujeres es un fenómeno multifactorial, que tiene como base fundamental factores sociales, como el sistema patriarcal, en el que se basa nuestra sociedad, y la construcción de género dentro de este sistema. El patriarcado es un sistema de organización jerárquico, que se basa en una distribución desigual del poder entre hombres y mujeres. La estructura patriarcal determina una construcción social binaria, basada únicamente en dos sexos, asignando roles desiguales diferenciados, en función del sexo, que se traducen en determinados mandatos de masculinidad y feminidad. Es decir, la estructura patriarcal crea un orden y un código simbólico, que otorga y legitima el poder de los hombres sobre las mujeres y las niñas, y excluyendo cualquier tipo de identidad que no responda al sistema binario hombre-mujer.

Este orden y código simbólico que determina y normativiza los roles de hombres y mujeres, penetra inconscientemente a través de la socialización desde la infancia; a través de la cultura, de los mitos y de la religión. El sistema normativo patriarcal forma parte de nuestro inconsciente, de nuestra memoria personal y colectiva. Así, a través de estereotipos, se construyen e interiorizan los mandatos de género, que determinan cuál es la “forma correcta” de ser mujer o de ser hombre.

Por lo tanto en el acompañamiento psicológico a mujeres que han vivido violencia machista es importante poder incluir esta perspectiva, ubicando la causa de la violencia, no en la persona que la sufre, sino en el sistema que la genera y la permite; de esta manera es importante acompañar a la mujer a desvelar los mandatos de género interiorizados, para poder desmontar las creencias que subyacen y poder trascenderlos (mandatos como “las mujeres son cuidadoras”, “las mujeres tienen que aguantar”, “los hombres se enfadan, las mujeres, no”, “los hombres se encargan de lo económico, las mujeres, de la casa y las niñas/os”, “el príncipe siempre rescata a la princesa (ella sola no puede)”, “una mujer necesita un hombre”...).

“Sólo existe aquello que se nombra”: Identificando la violencia y desmontando la culpa.

El acompañamiento psicológico en el proceso de recuperación de mujeres que han vivido violencia machista se inicia nombrando y visibilizando la violencia, desnormalizando, desnaturalizando y cuestionando la asimetría en la relación que da poder al hombre. Una de las trampas del sistema patriarcal es legitimar y normalizar conductas por las que el hombre pretende someter a la mujer. Existe un alto nivel de subjetividad en las conductas y dinámicas que se dan en el interior de una pareja, por lo que es adecuado incluir, en el proceso de recuperación, una mirada objetiva que acompañe a la mujer a analizar, detectar y a nombrar la desigualdad y los diferentes tipos de violencia que se han naturalizado, a través del paso del tiempo en la relación, a través de la integración de los mandatos de género, y a través de las propias consecuencias de la violencia (habituación, pérdida de confianza en el propio criterio, pérdida de autoconcepto positivo, etc.).

En este proceso, es necesario abordar las emociones que han acompañado a las vivencias del abuso, que juegan un papel importante en la perpetuación del ciclo de la violencia. El sentimiento de culpa, por parte de la mujer, suele estar presente en este proceso. Es importante colocar la responsabilidad de la violencia en quien la ejerce exclusivamente. Darle nombre a las diferentes violencias vividas legitima las emociones vinculadas a la violencia y ayuda a deslocalizar la culpa autoreferencial que experimentan las mujeres.

“Ni víctimas ni pasivas, mujeres combativas”: Abordando la rabia y convirtiéndola en asertividad.

El orden patriarcal determina y normativiza, también, diferentes estilos de comunicación y de expresión de sentimientos y emociones para hombres y mujeres; la expresión del enfado y el contacto con emociones de rabia o ira ha estado vetado especialmente para las mujeres, durante siglos; relegándolas a papeles sumisos y complacientes hacia su entorno, eliminando así su fuerza y su capacidad para poner límites. Sin embargo, es a través de la fuerza que otorga la rabia y el enfado, que muchas mujeres son capaces de romper el ciclo de la violencia, y alejarse del agresor.

No permitir las emociones relacionadas con enfado y rabia a las mujeres ha tenido como consecuencia que no se detecten interiormente con inmediatez, que se tapen, que no sean escuchadas, y por lo tanto, que se den conductas de sumisión y pasividad ante agravios hacia una misma.

La rabia y el enfado son emociones de defensa y de protección; es a través de la activación que generan estas emociones que las mujeres pueden poner límites a situaciones de abuso y de desigualdad.

Por ello, cuando en el proceso de recuperación de mujeres que han vivido violencia emerge la rabia, es necesario dejarle espacio, legitimarla, permitirla y expresarla; permitir que la mujer conecte desde ahí con su propia fuerza, y por ende, con el respeto hacia sí misma.

En este sentido, son adecuadas técnicas de descarga de rabia, como escritura de cartas, sin juicios, descargas físicas, permitiéndose la emoción libremente en un contexto controlado para, una vez liberada la emoción, poder reconvertir esa fuerza en asertividad y capacidad para poner límites.

“Amurallar el propio sufrimiento es arriesgarte a que te devore desde el interior” (Frida Kahlo). Sintiendo los propios deseos libremente y aprendiendo a respetarlos.

Los mandatos de género que determinan qué está permitido sentir y expresar a mujeres y a hombres obstaculizan que cada persona se escuche a sí misma honesta y naturalmente, detecte sus propios deseos, responda a sus necesidades y sienta y exprese libremente sus emociones.

A las mujeres se les ha asignado el rol de cuidadoras y han sido entrenadas en detectar las necesidades ajenas e incluso en cubrirlas, en muchos ámbitos; por el contrario, no se les ha concedido, a lo largo de la historia, la posibilidad de que esas habilidades de cuidado se dirigiesen hacia sí mismas, vinculando el autocuidado al concepto de egoísmo, y consiguiendo así, que muchas mujeres antepongan las necesidades de los/as demás a las suyas propias.

El acompañamiento psicológico debe incluir el restablecimiento de una relación íntima con una misma, el aprender a escucharse y a respetarse los deseos propios. Aprender a decir Sí y No libremente, y en consonancia con las propias necesidades, desmontando el mandato de complacencia hacia el entorno.

Propiciar que se inicie un camino desde dentro de una misma, en el que todas las emociones y sentimientos son legítimos y aprender a gestionarlas y expresarlas de forma respetuosa con una misma.

Estas son algunas claves introductorias de cómo incluir la mirada de género en la intervención en mujeres que han vivido violencia machista, pero existen muchas más; se trata de integrar en la intervención el análisis minucioso de las desigualdades y de los estereotipos interiorizados individual y colectivamente,teniendo en cuenta también, que el abordaje debe contemplar las especificidades de cada mujer, y debe adaptarse individualmente a su propia historia, a su propia subjetividad, y al momento concreto del proceso de recuperación en el que se encuentra.

Marta Mariñas
Psicóloga
Servicio de Atención, Recuperación y Acogida (SARA)
Barcelona


FSC organiza la jornada "Primeros pasos del Espai Ariadna. Claves en la intervención directa en mujeres drogodependientes que sufren violencia machista y sus hijos e hijas"

El “Espai Francesca Bonnemaison” de Barcelona acogerá el próximo 9 de septiembre este encuentro de 9:00 a 14:30 horas. La jornada contará con un espacio de presentación de resultados y reflexión conjunta sobre el trabajo que se realiza en el “Espai Ariadna”. Además, se favorecerá el diálogo entre las diversas redes involucradas en la atención a este colectivo: drogodependencias, violencia machista, infancia, etc. Se contemplan 3 mesas de trabajo en las que intervendrán diferentes profesionales del Área de Adicciones, Género y Familias, así como representantes institucionales.

El 20 de noviembre de 2013 nació el “Espai Ariadna”, iniciativa de la Fundación Salud y Comunidad (FSC) que pretende dar respuesta a las necesidades del tratamiento residencial detectadas, derivadas de la intersección de las problemáticas de la violencia machista y las adicciones en las mujeres y sus hijos e hijas. El servicio tiene un convenio con el Ayuntamiento de Barcelona y recibe apoyo de la Generalitat de Catalunya.

En la inauguración de la jornada, prevista a las 09:15 horas, intervendrán representantes de FSC, de la Generalitat de Catalunya y del Ayuntamiento de Barcelona. Seguidamente, a las 10:00 horas, tendrá lugar la primera mesa de trabajo, denominada “Construcción del conocimiento desde la práctica. Más allá de la intervención”, en la que participará la subdirectora del Área de Adicciones, Género y Familias, Gemma Altell y diversos profesionales del “Espai Ariadna”, entre ellos su directora, Míriam Vázquez. En ella se explicarán las experiencias significativas y principales aprendizajes derivados de este primer período de intervención.

En la segunda mesa de trabajo, denominada “Diálogo entre redes”, se abordarán cuestiones como las dificultades en la detección, necesidades detectadas no cubiertas, servicios que han de intervenir, y se reflexionará sobre cómo servicios del tipo “Espai Ariadna” pueden contribuir a mejorar la eficacia en la intervención.

En la apertura de esta mesa, en la que se compartirá la mirada desde diferentes abordajes profesionales, intervendrán Margarida Saiz, directora del Programa de Mujer del Ayuntamiento de Barcelona y Teresa Brugal, jefa del Servicio de Prevención y Atención a las Drogodependencias del Ayuntamiento de Barcelona. En este espacio se hablará sobre esta experiencia de trabajo conjunto entre dos áreas de conocimiento diferentes en la administración, y lo que ha supuesto de enriquecedora. Esta mesa se desarrollará a partir de las 12:45 horas y finalizará a las 14:00.

La jornada se cerrará con las intervenciones de Maite Tudela y Gemma Altell, directora y subdirectora del Área de Género, Adicciones y Familias de FSC. Será en la tercera mesa de trabajo, denominada “Aprendizajes y reflexiones de futuro”. En este espacio se recogerán las conclusiones que se desprendan de la jornada y se apuntarán los próximos retos que el servicio se plantea en un futuro inmediato, como es la evaluación de resultados.