FSC celebra el Día Internacional de las Personas Mayores con numerosas actividades
Los días internacionales sirven para sensibilizar a la ciudadanía sobre temas políticos, sociales, culturales, humanitarios, o relacionados con los derechos de los seres humanos, a través de diversas acciones. La Fundación Salud y Comunidad también se ha querido unir a esta celebración del 1 de octubre organizando diferentes actividades de sensibilización contra la discriminación por razón de edad en los centros de atención a los mayores.
Los días internacionales sirven para señalar que existe un problema sin resolver, un asunto importante y pendiente en las sociedades para que los gobiernos y los estados actúen y tomen medidas y/o para que los ciudadanos/as así lo exijan a sus representantes.
Como hemos podido ver a lo largo de nuestra experiencia diaria en la atención a las personas mayores, es extensa la bibliografía que aborda los estereotipos en los mayores, pudiendo definirse estos como imágenes simplificadas que nos ayudan a entender a otras personas y también acontecimientos en diferentes situaciones sociales que influyen en nuestra conducta.
En relación con el envejecimiento, y concretamente en lo referente a la vida en una residencia de mayores, los estereotipos afianzados en la sociedad a menudo han generado prejuicios negativos, y especialmente entre los más jóvenes. Entre otros, que los mayores constituyen un grupo homogéneo, con tendencias depresivas, falta de ilusión por la vida o apatía.
Así lo señala Isabel Ortega, trabajadora social y coordinadora del Área Psicosocial de La Residencia y Centro de Día “Las Fuentes”, perteneciente al Instituto Aragonés de Servicios Sociales y gestionada por la Fundación Salud y Comunidad (FSC) en consorcio con Valoriza Servicios a la Dependencia.
Cuando este tipo de imágenes son compartidas por la mayor parte de la sociedad, llegan a convertirse en una "profecía que se autocumple". Esto significa que en determinadas situaciones, las personas mayores presentan un comportamiento y rendimiento acorde con lo esperado en un determinado contexto social, convirtiéndose de alguna manera en víctimas de ideas preconcebidas acerca de cómo deberían actuar y qué se espera de ellas. Ello puede llegar a afectar a su autopercepción, autoestima y conducta.
Romper con este tipo de estereotipos implica aceptar que existen muchas formas de envejecer, dependiendo de la idiosincrasia de cada persona, según afirma Isabel Ortega. Uno de los estereotipos más afincados en nuestra sociedad es la identificación de la belleza con la estética joven, junto con una visión negativa de la vejez. Cuando esta visión se une a la rutina diaria en una residencia o centro de día, todavía se asocia más a una imagen de claudicación, institucionalización y pérdida del propio estatus de los mayores como personas que son.
Este año 2017, el lema para conmemorar esta celebración es “Entrando en el futuro: Aprovechar el talento, la contribución y la participación de los mayores”. Este lema hace referencia a la necesidad de posibilitar y aumentar la contribución de las personas mayores en sus familias, comunidades y sociedades, a través de vías efectivas que garanticen su participación, teniendo en cuenta sus derechos y preferencias.
En este sentido, desde el Área de Atención a la Dependencia de la Fundación Salud y Comunidad (FSC), en nuestra práctica diaria, intentamos que cada uno de nuestros usuarios/as pueda vivir de forma acorde a su historia de vida y preferencias, desde un modelo de Atención Centrada en la Persona que hemos logrado afianzar en nuestros centros. Además, consideramos que el envejecimiento es una etapa más de la vida, en la que se debe poner en valor todo el bagaje personal, vivencias e ilusiones de los mayores y hacia este fin encaminamos nuestro programa de actividades, como el que hemos organizado con motivo de esta celebración.
También, queremos aprovechar este día para hacer llegar a la sociedad un mensaje de no discriminación a los mayores por razón de edad, y en especial decirles a los usuarios/as de nuestros centros, que a pesar de su juventud acumulada y de esas arrugas y canas que lucen y solo otorga el paso de los años, siguen teniendo mucho que aportar en el día a día de los centros y que, con esa experiencia y bagaje vital nos beneficiamos todos/as.
Y a cada uno de nosotros/as, que destinemos unos minutos para reflexionar sobre la discriminación por razón de edad, y que tratemos de ser más conscientes, y tratemos de evitarla, por los efectos negativos que causa en las personas mayores (aislamiento social, pasividad, baja autoestima, etc.), mayores que, en otras condiciones, mantendrían una vida productiva, satisfactoria y saludable, gozando de una mayor y merecida calidad de vida.
Permanecer al borde de la herida
El equipo permanente del Centro de Acogida e Inserción para Personas sin Hogar de Alicante (CAI de Alicante), de titularidad municipal y gestionado desde 2002 por la Fundación Salud y Comunidad (FSC), está formado actualmente por auxiliares de servicios y técnicos auxiliares educativos más un grupo variable de sustitutos que garantizan, mediante un intrincado sistema de rotaciones la presencia educativa continuada en el centro de como mínimo dos profesionales, a veces tres, 24 horas al día, 365 días al año.
El cometido de este equipo está ampliamente desarrollado en protocolos de actuación que son revisados periódicamente. Quedan en su “hacer” tareas de distinta índole como es el control de accesos, la gestión de los servicios de duchas y consigna, la atención y cuidado de los espacios, la presencia nocturna en planta, la atención en el comedor, la primera acogida telefónica o presencial ...
Siendo estas tareas imprescindibles, significativas y polifacéticas, este artículo no quiere abundar sobre ellas sino, más bien, llevar la reflexión al ser, al sentido de este equipo como presencia educativa permanente en el centro. Me apropio para ello de la expresión “existencia educativa” y de todo un juego de palabras que puede terminar de matizar y dar sentido a la idea: asistencia, consistencia, resistencia... todas ellas afines a la raíz “sistere” (estar fijo).
Existir educativamente es asistencia, por lo menos en alguno de sus acepciones. Asistir al trabajo, permanecer en el centro (y puedo asegurar sin falsa humildad que, un día cualquiera, genera menos trastorno en el centro la ausencia del director que la de un compañero del equipo permanente). Asistir, etimológicamente “estar junto a” y lo que de allí podamos inferir: “ser-para-los-demás”, ayudar, aproximarse, salir al encuentro, generar ese encuentro, acoger, acomodar en el centro... este es quizás un lugar común, ya conocido… vamos más allá.
Existencia porque es un “estar desde”, donde la experiencia educativa no se define por una acción (la ayuda que se presta) sino por un posicionamiento, un lugar subjetivo a partir del cual se genera una relación que reconoce y reconstruye a una persona frente a otra persona. Es aquí donde la palabra consistencia cobra sentido. Es el “ser-para-sí-mismo”, no como un repliegue egocéntrico sino como una ardua y entrañable tarea de construirse como persona y profesional. La consistencia consiste en esto: no la herramienta, sino la mano que la sostiene; no la frase, sino el sujeto que se expresa, no el argumentario sino la inexcusable construcción personal del sentido, no lo que hacemos sino desde dónde lo hacemos...
Sé que vamos deprisa y casi a saltos, pero las líneas de este artículo son contadas y urge llegar más lejos. Lo fundamental de esta forma de existencia, la verdad, dolorosa y casi herética, alborotada y gritona, ocultada e ineludible, afilada y abrumadora, la intuición a la que quisiera llegar es esta: la esencia educativa es la de un “ser-para-la-muerte”, como enseñó Heidegger y como constatamos a diario por más que queramos mirar hacia otro lado. Si esto no es nombrado, toda relación de ayuda y toda construcción interior se viene abajo. El oficio del equipo permanente se desarrolla en el borde de la llaga, donde el tejido social ha sido erosionado hasta sangrar, donde la vida supura, donde incluso el propio centro no triunfa sino que, con frecuencia, apenas limita el daño. Es tocar el límite, la imposibilidad, el fracaso, la finitud. Pero es aquí, y solo desde aquí, desde donde realmente podemos fundamentar auténticamente nuestro existir educativamente, no en lo que llegamos a hacer en favor de los demás, tampoco en lo que logramos hacer por mejorarnos nosotros mismos, sino en la lucidez ante el fracaso y la resistencia al mismo.
Resistir no es ni una ilusión boba, ni una esperanza ingenua. Esta es la gran clave, el umbral donde el existir educativamente no se mide ya por el porcentaje de “consecuciones de objetivos” (¿los objetivos de quién?) sino por la capacidad de acompañar a las personas concretas en el fracaso social de la exclusión sin renegar de nuestro puesto. Esta es la “resistencia íntima”, con palabras del ensayista Josep Mª Esquirol, en su más que recomendable ensayo sobre una filosofía de la proximidad: resistencia al nihilismo y a la intemperie. Resistir no como lucha sino como serenidad, no como agitación sino como determinación, no como aplicación tecnológica sino como sabiduría y verdad íntima, no como inmovilismo sino como creatividad. Resistir como experiencia de la posibilidad de cada momento, aun desde la conciencia de la imposibilidad global. No es ni la huida, ni los cabezazos contra la pared, es la determinación de estar donde debemos estar, de permanecer con quienes debemos permanecer, sin confundirnos ni perder la esperanza, sin sucumbir ni al nihilismo ni a la locura, incluso ante la nada y la locura.
Escribiendo este artículo y precisamente tratando de digerir a Heidegger, ocurrió en el CAI un acontecimiento inesperado. Un residente, más bien joven, sin hogar, que llevaba apenas unos días con nosotros amaneció muerto en su cama. Este historia nos ha removido (resistir no es invulnerabilidad ni apatía, es una forma de estar vivo, radicalmente vivo). ¿Qué hicimos por él mientras vivió? Prácticamente nada, y ahora ya nada haremos. Pero estuvimos allí, el equipo permanente estaba cuando esa noche subió a la habitación y seguía estando cuando a la mañana siguiente no llegó a levantarse. No hay imagen que haga más visible este ser-para-la-muerte que asistir al levantamiento de un cadáver... y sin embargo es precisamente allí, donde se manifiesta la resistencia de este equipo, el valor de la permanencia cuando el hacer ha quedado absolutamente agotado. Estábamos allí, esta ha sido nuestra aportación, asegurar con nuestra presencia que este acontecimiento no es un dato aséptico sino experiencia compartida, duelo presenciado, silencio habitado.
A estas alturas el tratar de fundamentar la función educativa del equipo permanente solo en su utilidad práctica dentro del complejo engranaje del CAI, en sus competencias técnicas o en la aplicación de la normativa del centro es entender poco o nada de lo que estamos hablando. No vale siquiera apelar a que el equipo permanente aporta una visión educativa sobre el conjunto de la convivencia (a diferencia del equipo técnico que lo haría sobre los procesos individuales), todo ello es parcial, inexacto, insuficiente e incluso desenfocado. La existencia educativa va mucho más allá y se fundamenta más bien en esta forma de permanencia asistente, consistente y resistente que hemos esbozado.
¿Es pues el equipo permanente del CAI de Alicante un equipo educativo? No queda otro remedio que dar una respuesta compleja a una pregunta compleja: lo es ya...pero todavía no. Añadamos además, que jamás lo será si obviamos que el adjetivo “educativo” se apoya ineludiblemente en el sustantivo “equipo”. En ello estamos, muchos de nosotros, institucional, profesional y vitalmente comprometidos. Esta reflexión sigue y debe seguir todavía abierta.
Fidel Romero Salord
Director del Centro de Acogida e Inserción para Personas sin Hogar de Alicante
Las vacaciones y sus beneficios en la salud mental
Todos necesitamos tomarnos un tiempo de descanso de las tensiones y desafíos que se nos presentan en el día a día, y nuestros usuarios/as de los centros y servicios que gestionamos también. Por ello, cada año, durante el mes de septiembre, las personas usuarias de las Viviendas especializadas para adultos tutelados en La Rioja, pasan una semana de vacaciones en un entorno privilegiado, junto al mar, en Salou (Tarragona). Estas viviendas, pertenecientes a la Fundación Tutelar del Gobierno de La Rioja, están gestionadas por la Fundación Salud y Comunidad (FSC), en consorcio con el Grupo Lagunduz.
Sabemos que las vacaciones ayudan a reducir el estrés, ya que permiten poder realizar actividades placenteras fuera de la rutina y que también proporcionan una ruptura con el día a día muy necesaria para la salud mental. También, que reducen la ansiedad y mejoran el buen humor; así como la creatividad y la sensación de bienestar.
En el caso de las Viviendas especializadas para adultos tutelados en La Rioja, esta actividad extraordinaria se incluye en la Programación Anual de Actividades del centro, dados los muchos beneficios que aportan estas vacaciones a las personas usuarias.
Según explican desde el servicio, estos días de vacaciones en Salou que han concluido hace unos días les han permitido dejar de lado las preocupaciones en unos días de descanso y relajación, que han conseguido además que usuarios/as y profesionales estrecharan sus vínculos y lazos afectivos.
“Ahora tenemos recuerdos inolvidables como cuando todos juntos nos bañamos en el mar o cuando miramos la puesta de sol en los muelles del Club Náutico. También recordamos con ilusión esos momentos pasados tomando el sol en la Playa de Levante o cuando visitamos diferentes exposiciones… Todo ello nos da un impulso mental maravilloso, ahora nos sentimos mucho mejor”, señalan los usuarios/as de estas viviendas.
Según nos trasladan, este nuevo entorno con nuevos sonidos, vistas y olores ha supuesto un verdadero estímulo para su salud mental. También ha sido fundamental que retomaran antiguos hábitos o que aumentaran la actividad diaria, a través de paseos por el mar y/o nadar, lo cual les ha ayudado a motivarse y ha animado a hacer otras tareas, tanto durante estos días de vacaciones como en el periodo posterior a las mismas.
Con este fin de mejorar el bienestar que permite este cambio en la rutina, el equipo de profesionales de las Viviendas especializadas para adultos tutelados en La Rioja, ha tratado de mantener a los usuarios/as en la zona de comodidad y de hábitos diarios de las viviendas. “Para ello, hemos continuado la misma dinámica de las viviendas pero en otro contexto ya que la rutina les ayuda a esa sensación, tan necesaria, de control”, mantienen desde el servicio.
También han cuidado otros aspectos como hacer una buena planificación de las vacaciones para que cada persona usuaria pudiera tener un pleno control de las distintas situaciones nuevas que se les iban a presentar durante las vacaciones.
Ofrecerles seguridad para que superaran el posible miedo inicial, las preocupaciones y la ansiedad ante el cambio y las novedades también ha sido otro aspecto que ha considerado fundamental el equipo de profesionales, al igual que facilitar un ambiente relajado, sin preocupaciones o responsabilidades durante estos días.
Otro aspecto interesante que se ha considerado ha sido tratar de transmitir a las personas usuarias la alegría que supone compartir y disfrutar de todo lo que la vida nos ofrece, en este tiempo de ocio y descanso que les ha permitido aparcar la rutina y las obligaciones diarias.
Como cada año, los usuarios/as de estas viviendas han regresado estos días a La Rioja especialmente agradecidos por estas vacaciones y también, con más energía y proyectos a llevar a cabo a partir de ahora, si cabe con más fuerza e ilusión. También, con menos preocupaciones, con más vivencias y especialmente envueltos en esa sensación de bienestar que solo el sol y el mar nos da.
Empatía y organización, claves del trabajo del personal administrativo en las comunidades y pisos terapéuticos de FSC
Las comunidades terapéuticas “Riera Major” y “Can Coll” de la Fundación Salud y Comunidad (FSC), así como los pisos terapéuticos de los que dispone en Cataluña, servicios dirigidos principalmente a personas dependientes del alcohol y/o cocaína, requieren en su día a día del trabajo e intervención de equipos técnicos multidisciplinares.
Estos equipos están integrados por todas las figuras profesionales que conforman y responden a las necesidades del día a día en un centro de estas características, desde monitores y personal auxiliar, hasta los perfiles más específicos de hostelería, recepción, trasporte, mantenimiento y por supuesto, el personal administrativo, en el que nos vamos a detener con más detalle.
Se trata de servicios muy especializados que requieren de perfiles profesionales con una formación muy específica y de unas prácticas interdisciplinares muy concretas, ya que en estos centros el trabajo en equipo es fundamental y, por tanto, la organización interna y la coordinación entre profesionales básica.
La vida en las comunidades terapéuticas trata de reproducir además la cotidianeidad de la vida real, en la que todas las figuras profesionales mencionadas y las personas que residen en estos servicios interaccionan desde sus distintas funciones y roles en esta micro-sociedad.
En esta ocasión, hemos querido conocer la labor que realiza el personal administrativo que trabaja en las comunidades y pisos terapéuticos del Área de Adicciones, Género y Familia de la Fundación Salud y Comunidad (FSC), un perfil profesional clave para el buen funcionamiento y organización de estos servicios. Para ello, hemos hablado con Carol González, Deme Gómez y Mireia Linares, administrativas que trabajan en estos centros.
Todas ellas realizan tareas muy variadas como son la gestión administrativa del personal, la atención telefónica, archivo de documentación, gestión de gastos y presupuestos, control de compras, contabilidad general, envío y recibo de paquetes, etc.
Si bien realizan funciones que podríamos considerar de perfil administrativo, el hecho de estar en permanente contacto con los usuarios/as de comunidades y pisos terapéuticos, hace que su trabajo tenga muchas particularidades que van más allá de un trabajo de auxiliar administrativo convencional.
Muchas veces además la figura de administrativo/a se difumina y es entendida por las personas que residen en estos servicios como unos/as integrantes más del equipo asistencial; para ellos/as es difícil entender que el personal administrativo no conoce en profundidad sus casos en particular.
Por ejemplo, según hemos podido saber, en algunas ocasiones les toca lidiar con usuarios/as que en un momento dado se pueden mostrar impulsivos y sin capacidad de contención. En este sentido, Carol González, administrativa de los pisos terapéuticos “Teodoro Llorente” y “Rubió i Ors” de la Fundación Salud y Comunidad en Barcelona, reconoce que “si alguna vez me he encontrado con alguna persona que reside en estos servicios y a la que he visto nerviosa, me he retirado, pues no estoy preparada para ayudarle y esta tarea además corresponde a otros compañeros/as por su perfil profesional”.
Por otra parte, reconoce que el trabajo que realizan como administrativas es muy diferente al que se puede hacer por ejemplo en una empresa donde el trato es más frío y no existe esa relación tan cercana con los usuarios/as. “En estos servicios no puedes llevar puesta una coraza porque estás en contacto continuo con personas que están en un proceso de recuperación y que han decidido tener una vida en abstinencia de las drogas y el trato ha de ser más cercano”, explica Carol González.
El trabajo como auxiliar administrativo requiere en ocasiones de cierta paciencia en situaciones cotidianas con las personas que residen en estos servicios, teniendo que ejercer estos trabajadores cierta contención, cuando el resto de profesionales están ocupados, lo cual conlleva una buena gestión de las emociones.
En este sentido, Mireia Linares, administrativa de la comunidad terapéutica “Riera Major” explica que “en este trabajo te implicas más emocionalmente, lo vives de otra forma, por la tipología del servicio y porque trabajamos con personas en proceso de recuperación, lo que le da un carácter más humano”.
Además, añade que “en estos espacios se gestan por momentos muchas emociones, si bien no estamos preparadas para dar respuesta a situaciones que se puedan dar, sí es gratificante poder dar un abrazo a una persona usuaria en un momento dado o poder acompañarle en este proceso preguntándole por ejemplo cómo se encuentra”.
Si bien Deme Gómez, administrativa de la comunidad terapéutica “Can Coll”, reconoce que en sus 9 años de trabajo en este centro, ha aprendido a no implicarse tanto emocionalmente como en un inicio y que para ello utiliza técnicas de gestión emocional”.
Por otra parte, según trasladan estas profesionales de FSC, deben conocer en qué punto de su proceso se encuentran las personas que residen en estos servicios para saber, por ejemplo, si es adecuado comentarles en un momento dado que “están en negativo” (no disponen de dinero en efectivo propio), lo cual puede ser una cuestión delicada a plantear.
Por último, en el caso de las comunidades terapéuticas y más concretamente el de Deme Gómez, reconoce que una de las ventajas de este trabajo es poder trabajar en un entorno privilegiado, en plena naturaleza. “Ahora no cambiaría este espacio laboral por nada del mundo, ya que disfruto enormemente trabajando en un entorno de este tipo como buena amante de la naturaleza que soy”.
Bien, pues os emplazamos a otras próximas noticias para que podáis conocer más de cerca al personal que trabaja en las comunidades y pisos terapéuticos del Área de Adicciones, Género y Familia de la Fundación Salud y Comunidad (FSC).
Francisco González Sedeño: “El próximo día 19 queremos homenajear a las familias de acogida del Programa de Urgencia-Diagnóstico Familias Canguro de FSC”
La Fundación Salud y Comunidad (FSC) desarrolla este programa en Murcia, en consorcio con el Grupo Lagunduz. Este proyecto está destinado a niños y niñas y grupos de hermanos con edades entre 0- 6 años tutelados por la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia. En esta entrevista el presidente de la Fundación Salud y Comunidad (FSC) nos acerca a la realidad del acogimiento familiar, a unos días de la celebración de este entrañable evento.
- Ha comenzado ya la cuenta atrás para el homenaje que estáis preparando a las familias acogedoras del Programa de Urgencia-Diagnóstico Familias Canguro de FSC…
Sí, es un encuentro que estamos organizando con mucho cariño y en el que estamos muy implicados tanto desde la Fundación Salud y Comunidad como desde el Grupo Lagunduz, un evento que cuenta además con el apoyo del Gobierno Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, lo cual nos satisface enormemente. En este encuentro queremos reconocer la labor de una veintena de familias ante este grandísimo reto que supone el acogimiento familiar.
- La acogida familiar es una buena opción para los menores en situación de riesgo o maltrato.
Sí, el acogimiento familiar supone la convivencia de un/una menor con una familia distinta a la suya, dado que por circunstancias no pueden convivir con sus familias biológicas. A través de este proyecto se garantiza un entorno más adecuado en el que estos menores puedan crecer.
Dentro del acogimiento simple se encuentra el acogimiento familiar de urgencia. Esta medida se promueve, en el caso de este programa, entre menores de 6 años, sobre los que existan circunstancias que pongan en grave riesgo su integridad física o psíquica, siendo necesario que sean acogidos de forma urgente, tras la adopción de medidas protectoras por parte de la Administración competente, en este caso el Gobierno de Murcia.
A través del Programa de Urgencia-Diagnóstico Familias Canguro se garantiza un entorno adecuado en el que los menores pueden recibir los cuidados, atenciones, estimulación y afecto necesario que facilite su desarrollo, sin perder su identidad de origen, hasta que se resuelva su situación.
- Además, las familias que participan en este programa tienen un fin solidario de ayuda con el que brindan a estos menores la oportunidad de permanecer en un ambiente familiar estable.
Sí, de ahí el querer homenajear este espíritu solidario de las familias acogedoras, ya que la pensión que reciben cubre necesidades básicas de los menores (bebés en muchos casos). Por ello, podemos decir que estas personas son voluntarias en un sentido amplio.
A través de este encuentro, también buscamos sensibilizar a la población en general para que se solidarice con los menores en situación de desamparo. Por ello, otro de los objetivos de este encuentro es dar a conocer esta labor solidaria para tratar de incrementar la red de familias acogedoras.
Desde el Programa de Urgencia-Diagnóstico Familias Canguro ofrecemos formación e información a las familias solicitantes de acogimiento, además de seguir dando apoyo y asesoramiento a las familias que son acogedoras. Nos parece interesante darlo a conocer a las posibles familias interesadas para que sepan que van a contar con nuestro apoyo y acompañamiento en todo momento.
- ¿Qué nos puedes adelantar de los preparativos de este encuentro?
Se trata de un acto que, como comentaba al inicio, cuenta con el apoyo de la Administración y en el que todo indica que va a estar presente. También asistiremos diferentes representantes de la Fundación Salud y Comunidad y del Grupo Lagunduz.
Nuestra entidad tiene muy presente a todas las personas que colaboran como voluntarios/as, una labor que, como hemos señalado en otras ocasiones, complementa la calidez de la tarea desarrollada por los equipos de profesionales y que nos gusta reconocer a través de la celebración de jornadas a lo largo del año, cuya estructura viene a ser similar.
En este caso, será algo diferente, pero la finalidad de agradecimiento y de poner en valor esta labor altruista viene a ser la misma.
Puedo adelantar también que en breve, para mayor comodidad de las familias y del equipo de profesionales, se va a disponer de un nuevo local más adaptado a las necesidades actuales del programa. Aprovecharemos también esta jornada para dar a conocer todos los detalles sobre las nuevas instalaciones.
Se espera además una gran presencia de las familias acogedoras que sabemos que están muy ilusionadas con este reconocimiento. Para nosotros, desde la Fundación Salud y Comunidad y el Grupo Lagunduz, también es muy ilusionante poder agradecer la confianza y encomiable labor social de estas familias en el marco de esta jornada.
La importancia de la musicoterapia en la reducción de daños en drogodependencias
El uso de la musicoterapia como herramienta en el ámbito de adicciones no es reciente, si bien principalmente se ha realizado a través de técnicas pasivas o receptivas, en las que el proceso terapéutico se ha centrado en la escucha (GIM, Guided Imagery and Music).
No obstante, en musicoterapia también se utilizan técnicas activas o creativas, que permiten a las personas intervenir de manera directa en las sesiones, actuando, improvisando o creando música, de manera individual o grupal.
Recientemente, ha finalizado un taller de musicoterapia en el Centro de Baja Exigencia (CIBE) de Valencia, dispositivo para drogodependientes de la Fundación Salud y Comunidad (FSC). El taller ha sido impartido por Miguel Giner, musicoterapeuta y alumno del Máster Universitario en Investigación, Tratamiento y Patologías Asociadas en Drogodependencias de la Universidad de Valencia.
Esta actividad ha estado integrada en las prácticas extracurriculares del programa formativo de la Universidad de Valencia, supervisado y apoyado en el CIBE de Valencia por la psicóloga del centro Encarna Muñoz. Además, ha contado con la supervisión externa de la musicoterapeuta Montse Merino, Supervisora Europea de Musicoterapia (EMTR-Supervisor), perteneciente a la WFMT (Federación Mundial de Musicoterapia).
En esta intervención se ha utilizado el “Modelo Casa Baubo.A&S.Musicoterapia Científica Aplicada”, modelo y marco teórico de la musicoterapeuta Montse Merino, de carácter totalmente activo y que requiere la implicación de la persona a todos los niveles, según nos explican desde el servicio.
El taller ha consistido en 12 sesiones, a través de las cuales los usuarios/as participantes han podido disfrutar de valiosas experiencias vivenciales de autoconocimiento y exploración personal y emocional. Estas experiencias han logrado activar en ellos/as procesos internos, propios y autónomos de motivación para el cambio.
En concreto, en el servicio se ha logrado crear un grupo de asistencia continuada de 4 personas que, a través de la música, ha podido realizar un trabajo de gestión de conflictos y emociones personales (positivas y negativas) que les ha permitido superarse y volver a creer en sí mismos. Incluso en algunos casos, la propuesta ha traspasado las limitaciones horarias de la intervención y ha conectado con la motivación individual para que, de forma voluntaria, los participantes trabajaran además por su cuenta, a través de sesiones posteriores que se han centrado en la grabación, elemento esencial en el modelo de intervención implementado.
El taller se ha desarrollado a través de 12 sesiones, en las que los participantes han actuado, cantado y grabado temas conocidos. También, han creado letras propias trabajando la gestión de emociones en un recurso de intervención de baja exigencia y de reducción de daños, en una actividad que suponía un reto para un colectivo caracterizado por la supervivencia diaria en condiciones extremas, mediatizados por su dependencia a la drogas y donde la asistencia al taller no estaba condicionada a ninguna contraprestación.
Dada la buena acogida y resultados de este taller de musicoterapia en el CIBE de Valencia, esperamos poder realizar nuevas ediciones para que puedan beneficiarse más usuarios/as de esta interesante y terapéutica actividad.
La Residencia y Centro de Día "Infanta Elena" gestionada por FSC se suma al proyecto "En Bici Sin Edad”
Este programa trata de unir la generosidad del voluntariado que colabora en el mismo con la oportunidad de montar en bicicleta - triciclo, adaptada para personas mayores y/o con movilidad reducida que no pueden realizar esta actividad por sí mismas. En la iniciativa participó una usuaria de este servicio de la Agencia Navarra de Autonomía y Desarrollo de las Personas del Gobierno de Navarra, ubicado en Cordovilla (Galar), muy cercano a Pamplona, gestionado por la Fundación Salud y Comunidad (FSC), el Grupo Lagunduz y la Fundación Maresme para Personas con Disminución Psíquica.
El Ayuntamiento de Pamplona ha realizado durante este mes de septiembre, en colaboración con Ciclyng Without Age (CWA), la presentación del programa "En Bici Sin Edad. El derecho a sentir el viento en el pelo", iniciativa a la que ya nos referimos en una noticia anterior por la participación de las Viviendas con Servicios gestionadas por FSC en Barcelona.
La inscripción a esta actividad, incluida en la programación organizada con motivo del Mes de la Movilidad, estuvo abierta tanto a personas voluntarias para llevar las bicis como a usuarios/as que se quisieron sumar al proyecto. En este sentido, el consistorio invitó a participar a personas mayores y/o con movilidad reducida, así como a residencias, centros de día y a otros colectivos. Los paseos se realizaron durante una semana en Pamplona gracias a la colaboración de CWA Donosti, que cedió 4 bicicletas - triciclos para que pudieran utilizarse en los paseos programados.
Todas las personas que se animaron a participar de forma voluntaria en este proyecto, a las que se sumó nuestra usuaria de la Residencia y Centro de Día “Infanta Elena”, recibieron, antes de realizar su primer paseo, una formación teórica y práctica con las bicicletas – triciclo que iban a conducir.
Según hemos podido saber, Miren Fraile, usuaria de este servicio gestionado por la Fundación Salud y Comunidad, tuvo la oportunidad de disfrutar de una agradable jornada de paseo, acompañada por dos profesionales del centro, recorriendo emblemáticas calles de Pamplona.
Esta experiencia resultó muy gratificante tanto para ella como por las profesionales que la acompañaron y cumplió con las expectativas esperadas, por lo que no podemos más que expresar nuestra satisfacción por haber podido volver a participar en esta iniciativa.
Por parte del consistorio, se logró que personas mayores y/o personas con movilidad reducida se convirtieran en las protagonistas de una programación que buscaba poner en valor el concepto de movilidad universal, no solo vinculado a la circulación o al desplazamiento de un lugar a otro. De esta forma, se logró crear una ciudad más accesible, en la que se garantizó el derecho de todas las personas a la movilidad.
Por todo ello, queremos agradecer esta oportunidad al Ayuntamiento de Pamplona, y especialmente a los voluntarios/as que hicieron posible que nuestra usuaria pudiera realizar este paseo tan especial por la Vieja Iruña.
El proyecto de FSC "En Plenas Facultades" arranca con el nuevo curso universitario
Este programa de la Fundación Salud y Comunidad (FSC), que ya cuenta con 17 años, ha vuelto a desarrollar actividades de difusión y captación para formar a estudiantes como agentes de salud en las universidades de Cataluña, Comunidad de Madrid, Comunidad Valenciana y Baleares. El proyecto tiene como objetivo la promoción de la salud y la gestión de los placeres y riesgos, a través de la prevención, la sensibilización y la formación en materia de drogas, y conductas sexuales de riesgo.
En este nuevo curso lectivo 2017/2018, el programa se lleva a cabo en 10 universidades: Universidad de Barcelona, Universidad de Vic, Universidad de Gerona, Universidad de Lérida, Universidad Rovira i Virgili de Tarragona, Universidad Complutense de Madrid, Universidad Carlos III de Madrid, Universidad Jaume I de Castellón, Universidad de Valencia y Universidad de Las Islas Balears.
Las novedades que el proyecto ha preparado para este nuevo curso son las siguientes: por una parte, se han empezado a realizar formaciones en la Escuela de Enfermería de la Universidad de Barcelona con muy buena acogida por parte de los y las estudiantes.
Además, se ha editado nuevo material del proyecto en formato de libreto ilustrado (Viaja con placer) para poder trabajar con los universitarios de una forma más amena y divertida diferentes ideas relacionadas con drogas y sexualidad. De esta forma, se trata de seguir una línea emprendida con el anterior libreto del proyecto “Quédate con la historia”.
Por otra parte, desde el programa se sigue apostando por la difusión de su aplicación gratuita para móviles Android “Run4Fun EPF” que se puede descargar a través de Google Play. Se trata de un juego educativo ideado por estudiantes universitarios que simula a lo largo de su recorrido la opción de consumir o no drogas y la toma de medidas de reducción de riesgos del consumo, con sus consecuencias tanto positivas como negativas.
Además, el proyecto tiene previsto mantener su ritmo de colaboraciones con otros programas de FSC, como el Observatorio Noctambul@s, así como su colaboración con ayuntamientos y organizaciones que trabajan en el ocio nocturno y/u otros programas universitarios existentes, cuya complicidad es imprescindible para que entre todas y todos podamos multiplicar el mensaje preventivo.
El proyecto “En Plenas Facultades” de FSC recibe el apoyo del Plan Nacional sobre Drogas del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, de la Diputación de Barcelona, así como de la Conselleria de Sanidad de la Generalitat Valenciana y de la Generalitat de Cataluña.
https://www.youtube.com/watch?v=lidM7inX1Eg
La Fundación Salud y Comunidad (FSC) asesora a El Salvador y Chile en el diseño de programas preventivos en drogodependencias
Nuestra entidad ha sido invitada a participar durante este mes de septiembre en un seminario celebrado en Santiago de Chile para apoyar el diseño, la formulación, así como los mecanismos e indicadores de evaluación de un programa preventivo para el consumo de drogas en los Centros de Protección del Instituto Salvadoreño de la Niñez y Adolescencia (ISNA). Este proyecto también incluye un plan de implementación en los Centros de Protección del ISNA.
El programa se propone contribuir al fortalecimiento de políticas públicas para la tutela de los derechos de los niños, niñas y adolescentes vulnerables de El Salvador que se encuentran bajo medidas administrativas y judiciales, dependientes del ISNA y del Centro de Integración Nacional para la Niñez y Adolescencia (CINNA), en relación a la prevención y tratamiento de consumos problemáticos de drogas.
Este proyecto cuenta con el apoyo del Fondo Mixto de Cooperación Triangular Chile-España, que depende de la Agencia de Cooperación Internacional de Chile (AGCI). La estrategia de intervención se fundamenta en la cooperación técnica, aprovechando la experiencia acumulada por las instituciones chilenas. Al tratarse de un proyecto de cooperación triangular, los principios que guiarán su ejecución serán los propios de la cooperación sur-sur, es decir el consenso, la igualdad, complementariedad y beneficio mutuo, entre otros.
En representación de la Fundación Salud y Comunidad (FSC), acudió como experto a este seminario de trabajo nuestro compañero Otger Amatller, coordinador de Proyectos de Prevención. Según nos explica, el objetivo de la actividad fue apoyar a profesionales del CINNA, en aspectos conceptuales y metodológicos para el desarrollo de estrategias de prevención selectiva.
Por otra parte, durante el seminario también se trató de aportar herramientas que permitan diseñar, formular y evaluar un programa de prevención selectiva para el consumo de drogas en niñas, niños y adolescentes vulnerables de El Salvador.
La jornada técnica tuvo una duración de 5 días, realizándose exposiciones temáticas de distintos expertos/as en prevención que se combinaron con metodologías de trabajo práctico y experiencial; promoviendo en todo momento la participación de los mismos.
Además, se generaron espacios de análisis y discusión a partir de la presentación de materiales audiovisuales para facilitar el desarrollo y diseño de un programa preventivo que se ajuste a las necesidades de los niños, niñas y adolescentes vulnerables que se encuentran bajo medidas administrativas y judiciales, dependientes del ISNA.
Para la Fundación Salud y Comunidad (FSC) es muy satisfactorio poder participar en la elaboración de un plan de trabajo para el diseño de este programa preventivo en El Salvador y por otra parte, acompañar a su implementación en Chile por nuestra experiencia en diseño, evaluación e implementación de programas de prevención en materia de drogodependencias.
Cabe señalar que nuestra entidad ya estuvo presente en un seminario de prevención celebrado el pasado año en Chile, en el marco del Proyecto Triangular con El Salvador.
En este sentido, queremos mostrar nuestro agradecimiento por la confianza depositada de nuevo en FSC, a través de la participación en esta segunda jornada de trabajo.
FSC organiza una Jornada de Puertas Abiertas para presentar el Centro de Atención a Menores de Ateca en Aragón
Durante este mes de septiembre, ha tenido lugar esta presentación para dar a conocer este servicio de la Fundación Salud y Comunidad (FSC), ubicado en Ateca (Zaragoza), en las inmediaciones de Calatayud, tras recibir una gran acogida vecinal inicial. A la misma, realizada en el Salón de Plenos del Ayuntamiento, asistió el alcalde de Ateca, Ramón Cristóbal Júdez, así como una numerosa representación de la Corporación municipal y de colectivos y asociaciones municipales, y también directivos de nuestra entidad.
Como informábamos en una noticia anterior, la Fundación Salud y Comunidad, juntamente con la Asociación Lagunduz, ha obtenido recientemente por parte del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS) la adjudicación de 36 plazas de atención a menores que presentan dificultades de adaptación social o familiar en dos servicios de titularidad propia. Estos centros están ubicados en los alrededores de Calatayud (Zaragoza).
Tanto el servicio situado en la población de Pietas-El Frasno, que cuenta con 16 plazas acreditadas, como el ubicado en el municipio de Ateca, con 20 plazas, han requerido de una importante rehabilitación de los inmuebles para adaptarlos a las necesidades actuales, dado que el próximo 1 de octubre está previsto el ingreso de los primeros menores en este último recurso. Por ello, los mayores esfuerzos realizados durante las últimas semanas a nivel de rehabilitación y adquisición de mobiliario, se han centrado en el equipamiento de Ateca.
En concreto, el pasado 6 de septiembre, tras la rehabilitación del Centro de Acogida de Ateca, tuvo lugar la presentación de las características de este recurso. Posteriormente, se llevó a cabo una jornada de puertas abiertas, en el marco de las fiestas patronales para que los/as atecanos pudieran visitar las instalaciones de un edificio emblemático municipal que con anterioridad fue una residencia de atención a mayores y que ahora, sin dejar sus fines sociales, se destinará a los más jóvenes. A la jornada asistieron más de 300 personas de todas las edades que pudieron visitar las renovadas instalaciones y disfrutar además de un aperitivo preparado para la ocasión.
Entre otras personas, se contó con la presencia del presidente de la Comarca de Calatayud, Ramón Duce, y de representantes de colectivos como Cáritas de Ateca, de la Fundación Hospital de Jesús y de las asociaciones Amas de Casa y Naturateca. También, asistieron representantes del ámbito educativo, en concreto del Colegio Público Virgen de la Peana y del Instituto de Educación Secundaria Zaurin de Ateca, y del ámbito religioso. Tras la sesión, todos ellos se brindaron a colaborar y a acoger a los menores, por lo que queremos aprovechar para mostrar nuestro agradecimiento por ello.