Expertos de la Secretaría del Plan Nacional del Sida y del Grupo de Estudios del Sida (GeSIDA) de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC) han creado dos nuevos consensos en VIH sobre trastornos neurocognitivos y tratamiento de la tuberculosis.
Estos documentos ofrecen recomendaciones actualizadas que pretenden «servir de guía» a los profesionales sanitarios que intervienen en la atención de pacientes, indican. Para ello, estos consejos vienen acompañados de una indicación sobre la «fuerza y calidad» de la evidencia que las sustentan, «de acuerdo con una modificación de los criterios de la Sociedad Americana de Enfermedades Infecciosas (IDSA, por sus siglas en inglés)», señalan.
Los nuevos consensos son «fundamentales» para la prevención, diagnóstico y tratamiento del VIH y sus comorbilidades asociadas, explican los expertos. A juicio del presidente de GeSIDA, Pere Domingo, estos textos son tan cruciales para los pacientes «como los propios avances en la investigación».
A éstos se unen también la actualización de otros tres consensos, siendo éstos sobre tratamiento antirretroviral, atención en urgencias y transmisión vertical del VIH. En los dos últimos han participado también expertos de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES), de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) y de la Sociedad Española de Infectología Pediátrica (SEIP).
En total, los cinco ofrecen ayuda de diferentes niveles a los profesionales, tipificándose ésta según evidencia y calidad. Particularmente, el de tratamiento antirretroviral concluye que este debe recomendarse siempre «en los pacientes sintomáticos, en la gestante, en las parejas serodiscordantes con alto riesgo de transmisión, en la hepatitis B que requiera tratamiento y en la nefropatía asociada al VIH», sostienen.
LAS ESTRATEGIAS TERAPÉUTICAS DEBEN SER INDIVIDUALIZADAS
Los expertos, que señalan que las estrategias terapéuticas «deben ser individualizadas» para conseguir en cualquier circunstancia una carga viral plasmática indetectable, subrayan que en los asintomáticos la cifra de linfocitos CD4+, la carga viral plasmática, la edad y las comorbilidades «son los factores que determinan el inicio».
Por su parte, el consenso de transmisión vertical acutualiza «la recomendación de repetir la prueba de VIH en el tercer trimestre de gestación, la actitud a seguir tras el diagnóstico intraparto de la infección por el VIH, el modo del parto en la gestante seropositiva y las pautas de tratamiento antirretroviral en la mujer embarazada», afirman.
En el acuerdo de atención en urgencias, los especialistas se ha cambiado el fenotipo del paciente, siendo actualmente «menos reconocible externamente», lo que puede llevar a no considerar el diagnóstico y por tanto retrasarlo, indican. Por ello, se aportan actualizaciones para que los profesionales puedan atender «de forma correcta» a los pacientes que presentan una patología urgente derivada de la infección por el VIH o relacionada con la misma, señalan.
En cuanto a los nuevos consensos, particularmente en el de trastornos neurocognitivos, se muestra la gran evolución que éstas han experimentado, «principalmente desde la aparición de los tratamientos antirretrovirales». En la actualidad son «escasas» las guías clínicas para el manejo de estos pacientes, por lo que esta guía «aborda la investigación, la prevención y el manejo».
Por último, en el consenso sobre tratamiento de la tuberculosis se especifica que la incidencia de la tuberculosis en adultos con VIH «es aún 100 veces superior a la de la población general en España». Ante ello, el objetivo es «establecer pautas específicas para el tratamiento de los pacientes con coinfección», concluyen.
Fuente: Europa Press