La Fundación Mujeres lanza una web para aquellas que buscan trabajo y para las emprendedoras
Las mujeres disponen, desde hace unas semanas, de una nueva red social orientada a la búsqueda y oferta de empleo en España. La página web www.activatenred.es, iniciativa de la Fundación Mujeres, es el punto de encuentro entre empresarias, emprendedoras y aquellas que quieren trabajar pero no encuentran la forma de conseguirlo.
¿Por qué una red social sólo para ellas? Porque son quienes más crudo lo tienen en el mundo laboral. Y la crisis aún se lo pone más negro. Las estadísticas no admiten dudas. La última Encuesta de Población Activa del Instituto Nacional de Estadística (INE), correspondiente al tercer trimestre de 2011, destaca que el desempleo afecta más a las mujeres. En ese periodo, 114.000 trabajadoras perdieron sus empleos. La cifra en los varones fue muy inferior, de 32.800. Esta desigualdad aún tiene más relevancia si se tiene en cuenta que el 52,93% de las mujeres entre 16 y 65 años trabaja, frente al 67,64% de los hombres.
«Aunque nuestra vida no se parece en absoluto a la de nuestras madres, seguimos en peores condiciones que los hombres. Y si se trata de crear una empresa, las mujeres tenemos más dificultades financieras», destacó la directora de la Fundación Mujeres, Marisa Soleto, en la presentación de la red social.
Esta herramienta es el colofón a la iniciativa que impulsó la asociación hace ya 17 años, cuando sus responsables crearon un servicio de apoyo a la búsqueda de empleo y para animar a las mujeres a crear sus empresas. «Sólo la voluntad de crear relaciones laborales que eviten estereotipos hará posible que cambiemos el futuro. Durante estos años hemos aprendido mucho de las mujeres que han pasado por nuestros cursos. Y hemos sacado una conclusión: que con esta red lo vamos a tener mucho más fácil», añadió Soleto.
Cambio radical
Ana Dee concluyó el curso de la Fundación Mujeres hace unas semanas. Cansada de 13 años trabajando en una agencia de publicidad, sentía desde hacía «mucho tiempo» la necesidad de dar lo máximo de sí misma, y para ello buscó trabajar por su cuenta. «Quería emprender un proyecto con mis propios valores», explica.
La lucecita se le encendió cuando topó, por casualidad, a través del muro de Facebook de una amiga, con un espacio de coworking en Madrid, un local alquilado por varios profesionales autónomos a la vez. Comparten espacio, gastos y, aunque cada uno trabaja en lo suyo, enriquecen sus productos, dada la diversidad de sus tareas.
Ana lo explica con entusiasmo. En mayo empezó la nueva etapa, como jefa de sí misma. Hoy dice sentirse más feliz que nunca. Ana, de 35 años, se ha especializado en ayudar a las empresas a crear su propia marca, a diseñar sus planes de publicidad y a crear sus páginas web. «Toda mi vida me he reciclado. Si no, no hacemos nada en el mundo competitivo en que vivimos», asegura.
El curso de la Fundación Mujeres le enseñó a llevar las cuentas de su propia empresa. «No tenía plan de empresa, ni estrategia. Me enseñaron a definir qué quería ofrecer, a quién iba dirigido mi producto y a calcular», explica. Según destaca, no es fácil llevar las cuentas de una empresa que empieza de cero. Y eso que, en su caso, la inversión inicial se limitaba a sus ideas, su cámara de fotos y su ordenador.
La Fundación Mujeres ha ayudado a más de 1.200 mujeres a crear y consolidar sus propias empresas, destaca su coordinadora del Área de Empleo, Angie Prado. Con la creación de la página web pretenden fortalecer todo ese trabajo. Si hasta ahora una de las fórmulas habituales para que las emprendedoras intercambiaran sus experiencias era organizar desayunos, la herramienta digital pemitirá llevar a cabo estas sinergias sin desplazarse del puesto de trabajo.
Aunque la red social va dirigida a mujeres, también está abierta a que formen parte de ella aquellos empresarios comprometidos con la igualdad. Además, los cursos de la Fundación Mujeres van dirigidos a mujeres maduras y con poca formación que necesitan ayuda para redactar su currículum. Alejadas incluso de las nuevas tecnologías, encontrar trabajo aún es más difícil para ellas.
La red social, en definitiva, pretende empoderar a las mujeres: sin empleo son dependientes. Incluso quiere ir más allá. Crear puestos de trabajo y generar riqueza. «Vamos a ver si lo conseguimos», concluye Soleto.
Fuente: Público.es