El pleno de la Eurocámara ha aprobado este jueves por unanimidad una resolución en la que exige a India que combata todas las formas de violencia contra la mujer mediante la adopción y aplicación de leyes más estrictas.
La decisión se produce a raíz de la violación y asesinato de la joven india de veintitrés años Jyoti Singh Pandey el pasado 16 de diciembre en un autobús de Nueva Delhi. Un crimen que ha desencadenado una oleada de protestas e indignación del pueblo indio.
Los eurodiputados hacen un llamamiento al Gobierno indio para que endurezca las leyes para combatir toda forma de violencia contra las mujeres, y para que implemente un plan nacional de prevención y apoyo a las víctimas.
El caso Pandey ha puesto de manifiesto la indiferencia generalizada ante la violencia de género en aquel país. Por eso, el Parlamento Europeo (PE) insta a que se desarrollen campañas educativas para sensibilizar y cambiar la actitud de los ciudadanos.
Según las autoridades indias, la joven Pandey fue agredida en un autobús falso que un grupo de hombres tomó para recorrer la capital en busca de una víctima. La estudiante de fisioterapia y un amigo subieron pensando que se trataba de un autobús regular. Los seis hombres que estaban dentro, incluido el conductor, cometieron la violación colectiva que acabó con su vida.
Una violación cada veinte minutos
24.000 violaciones fueron denunciadas en India en 2011 frente a las 2.487 en 1971. Según un informe del Registro Penal, cada veinte minutos una mujer india es violada. Los agresores en la mayoría de los casos conocen a la víctima. En 2011 se produjeron un total de 228.650 delitos contra la mujer.
Este tipo de violencia no se reduce a los ataques sexuales; el rapto, la crueldad y el acoso sexual son prácticas habituales en el país asiático. Los expertos subrayan que el número de casos que no se denuncian es muy alto, debido al estigma social y la indiferencia.
La respuesta del Gobierno indio por el momento ha sido crear una comisión especial para elaborar propuestas legislativas sobre la violencia sexual.
Durante la sesión plenaria, los eurodiputados también abordaron las recientes violaciones de derechos humanos en Bahréin y la República Centroafricana.
Fuente: Parlamento Europeo