La historia de los derechos LGBTI: la necesidad de un cambio de paradigma que respete la diversidad afectiva y la identidad de género
Durante mucho tiempo, esta historia ha sido ignorada y ocultada, pero gracias a los avances sociales y legales realizados, hemos llegado a este momento de reivindicaciones LGBTI, que es un acrónimo del colectivo de lesbianas, gais, bisexuales y transexuales e intersexuales.
En general, existe mucha más información sobre homosexualidad masculina (no nos resulta extraño ¿verdad? que las mujeres, una vez más, queden más invisibilizadas…), así como tampoco podemos entender la homofobia que ha existido y existe sin enmarcarlo en un contexto heterosexista y machista.
Vayámonos a épocas lejanas…
En Babilonia, la homosexualidad era considerada algo aceptado y no se condenaba; es más, había cierta conexión entre prácticas sexuales homosexuales y religión. Un ejemplo de ello sería el relato épico de Gilgamesh. Así como en el caso de Egipto, las lecturas homosexuales de los mitos de los dioses Seth y Horus.
En Grecia, son conocidas las relaciones entre hombres adultos y jóvenes, el ejemplo de la homosexualidad de Alejandro Magno o la historia de la poetisa Safo que vivía rodeada de un séquito de mujeres en Lesbos (de ahí lo de sáficas y lesbianas).
En Roma, por un lado, en la primera mitad del imperio romano, la homosexualidad es aceptada y hay incluso registro de matrimonios –contratos privados entre particulares- entre hombres (por ejemplo, Nerón). Por otro lado, cuando empieza la era cristiana, acaba siendo totalmente prohibido.
En Asia oriental, tanto China como India lo veían como algo totalmente normal, incluso en los textos indios se menciona la existencia de personas del «tercer género» (engloba a transexuales e intersexuales, homosexuales, bisexuales… personas que mezclaban masculinidad y feminidad). Por su parte, en el Japón del periodo Heian, hay referencias a relaciones homosexuales y a la existencia de transexuales, como por ejemplo en la Historia de Genji.
Antes de la colonización de Norte América, existían en las culturas indígenas personas que llamaban de «dos espíritus» con roles masculinos y femeninos. Por su parte, los aztecas eran increíblemente intolerantes y crueles con los homosexuales, castigando la “sodomía” con la muerte. Sin embargo, por ejemplo, los toltecas eran extremadamente tolerantes con la homosexualidad. Siempre ha existido la homosexualidad, en todos los siglos y lugares del mundo. Lo que ha ido cambiando ha sido la forma que socialmente se ha visto.
Época feudal
En esta época, la homofobia bíblica tiene mucho que ver con el estado de guerra perpetua en el que vivían. Los pueblos guerreros, de religiones abrahámicas monoteístas como el cristianismo, judaísmo e islamismo, necesitaban soldados y por tanto, se castigaban todas las prácticas sexuales que no fueran estrictamente con fines reproductivos.
Estas son las prácticas sexuales que la Iglesia considera prohibidas actualmente. Se condena todo lo que no sea reproductivo, incluyendo la homosexualidad como sodomía, según la interpretación de la narración bíblica de Sodoma. Veremos que este es un término que se irá repitiendo con frecuencia incluso en las legislaciones.
Por supuesto, la inquisición medieval contribuyó a perseguir en base a supuestas herejías, brujerías y sodomía. Por ejemplo: la Corona de Aragón en el siglo XVI ejecutó por sodomía a cientos de personas.
Enrique VIII (Reino Unido) impulsó la primera ley gubernamental contra la sodomía, considerando delito cualquier práctica sexual «antinatural contra la voluntad de Dios y el hombre». Esta ley se extendió por todas las colonias británicas, base de legislaciones en países de América, África y Asia.
En el Renacimiento destacan homosexuales como Miguel Ángel y Leonardo da Vinci, este último estuvo incluso encarcelado por ello.
La Revolución francesa (que no fue tan revolucionaria porque dejó de lado a todas las ciudadanas que habían luchado para conseguirla, tal y como apunta Olimpia de Gouges, pero este es otro tema…) basándose en los principios de la Ilustración, elimina los delitos como la brujería, la herejía y la sodomía. Sin embargo, se mantiene en el código francés y con Napoleón la «ofensa a la decencia pública», algo que se utilizaría posteriormente en la legislación de Europa y americana.
Sorprende que uno de los lugares donde más fuerza tiene el movimiento de liberación LGBTI sea Alemania a finales del siglo XIX. En especial, en Berlín donde se crea el primer comité científico humanitario a favor de la despenalización y el reconocimiento de la homosexualidad y transexualidad y se articula una organización pública de defensa de los derechos LGBT.
Cambio de paradigma
No se produce un cambio de paradigma hasta los años 60. Estas son algunas de las fechas más relevantes:
- 1962: Illinois se convierte en el primer Estado en despenalizar el sexo homosexual consentido.
- 1969: En el barrio de Greenwich Village de Nueva York, se produce un evento que supone un antes y un después. Judith Gardland, la protagonista del Mago de Oz, considerada un icono de la época, muere el 27 de junio de este año; muchos gais, lesbianas, trans… se reúnen en el Bar Stonewall Inn, un bar clandestino regido por la mafia al que acudían personas homosexuales y trans, para llorar su muerte.
- Por último, el 28 de junio de 1970, se desarrolló una manifestación que llevó por nombre la Marcha del Día de Liberación o, como se conoce ahora, Marcha del Orgullo Gay, del Orgullo LGBT o Pride (traducción como Dignidad).
No podemos olvidar que la lucha de los derechos LGBT ha estado ligada también a la lucha contra el VIH, que se inicia en los ochenta cuando el SIDA empieza a ser una epidemia entre la población homosexual y trans y que pone de relieve la desprotección legal de sus parejas; muchos novios son expulsados de sus casas por los familiares del difunto, no tienen derecho a heredar ni a pensión de viudedad o cobertura.
En los años noventa, la lucha se acelera:
- En el año 2000, Vermont se convierte en el primer Estado de Estados Unidos en legalizar el matrimonio igualitario.
- En 2001, Holanda es el primer país del mundo en hacerlo.
- En el 2005 lo hace España.
La historia de la humanidad ha tratado mal al colectivo LGBTI y, por ello, se hace necesario un cambio en el paradigma heterosexista y homófobo, lesbófobo, bifóbico, transfóbico, por el respeto a la diversidad afectiva y a la identidad y expresión de género.
La Fundación Salud y Comunidad (FSC) cuenta con un servicio de atención a la diversidad sexual y de género en el que se atiende la violencia intragénero, así como la aceptación de la orientación o identidad y problemas familiares, entre otros.
Paula Alcaide
Responsable de diversidad sexual de la Fundación Salud y Comunidad (FSC)