Desde el Proyecto Malva de la Fundación Salud y Comunidad (FSC), acabamos de lanzar nuestra campaña de sensibilización de este año 2021. Se trata de una infografía sobre juego problemático, enfocada desde la perspectiva de género. Este año, por primera vez, hemos querido ir más allá de las drogas, abordando las adicciones sin sustancia. En concreto, las que puede generar el juego, tanto presencial como digital.
Como señala la Estrategia Nacional sobre Adicciones 2017-2024, el análisis de conductas adictivas, con o sin sustancias, es una prioridad de la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional Sobre Drogas. El Proyecto Malva de FSC está tratando de dar respuesta a esta prioridad, a través de diferentes acciones.
Con este motivo, el pasado mes de junio realizamos el VII Encuentro #GéneroyAdicciones «Abordemos el juego problemático con gafas violeta». Durante el mismo, se analizó el consumo, tanto de hombres como de mujeres, desde miradas feministas para aportar herramientas analíticas y prácticas, de cara a mejorar la prevención y la intervención con personas con problemas de juego.
Desde el Proyecto Malva, señalan que es necesario incorporar la mirada feminista en el abordaje del juego, por varias razones:
- El género, como eje de ordenación social que jerarquiza lo masculino frente a lo femenino, tiene un claro impacto en cómo hombres y mujeres juegan, así como en las consecuencias del juego para unas y otros.
- Tanto unas como otros juegan, pero las motivaciones para hacerlo o las elecciones de juego son diferentes en función del género.
- Además de diferencias, encontramos desigualdades: mayor invisibilización de las mujeres jugadoras, barreras de acceso y permanencia en los tratamientos por trastornos de juego o mayor estigma y culpabilización de las mujeres con problemas de adicción al juego.
- Por todo ello, es imprescindible incorporar una mirada de género en el análisis del juego y en las estrategias para combatir las problemáticas asociadas. En este sentido, “con las gafas violeta puestas”, se contribuirá a la efectividad de las intervenciones y a la justicia social.
Como apunta la Guía Clínica «Mujer y juego«, elaborada por la Federación Española de Jugadores de Azar Rehabilitados (FEJAR), que se presentó en la jornada organizada por el Proyecto Malva el pasado mes de junio, existe «un patrón relacionado con el género en cuanto a preferencias de juego y motivación por jugar. Los hombres tienden a elegir juegos con un mayor nivel de acción y competitividad, como las apuestas deportivas, mientras que las mujeres tienen una mayor tendencia a usar juegos menos estratégicos, como el bingo, las máquinas tragaperras o la lotería…”.
Por otra parte, los hombres muestran una mayor impulsividad y búsqueda de sensaciones y la ganancia económica, mientras que las mujeres tienen una mayor tendencia a jugar como forma de escape a problemas relacionados con el género y con las múltiples y graves violencias que este sistema promueve. Como se señala también en esta guía, «los estudios muestran que son más mujeres afectadas que aquellas que acuden a los centros de tratamiento», ya que la mujer jugadora, «además de la problemática adictiva, sufre mayor estigma social».
Para más información sobre nuestro trabajo, se pueden consultar los vídeos y presentaciones del VII Encuentro de #GéneroyAdicciones 2021: «Abordemos el juego problemático con gafas violeta».